En 2008, las grandes empresas de infraestructuras españolas pusieron rumbo a mercados internacionales para sobrevivir. FCC, Sacyr o Acciona salieron reforzadas de aquellos movimientos obligados, y hoy muchos de sus proyectos son emblemas en el exterior. Tiempo después, el Ayuntamiento de Madrid y el Colegio de Ingenieros de Canales, Caminos y Puertos empezaron a darle vueltas a una idea: hacer todo lo posible por convertir a la capital en un enclave de referencia mundial de la construcción, la ingeniería y la arquitectura. Traer de vuelta parte de esa valía y multiplicarla además de potenciar el mercado interno
Desde ayer, el clúster que visionaron entonces es una realidad. Madrid coordinará, bajo el manto del espíritu colaborativo, un plan estratégico de captación y retención del talento y del negocio en esas áreas. Más de 20 entidades públicas y privadas han puesto la primera piedra de un proyecto que quiere llevar a la capital a un nuevo estatus a través de formación, capacitación, I+D+i, desarrollo y fortalecimiento empresarial, promoción y difusión del sector
Miguel Ángel Redondo, delegado de Economía, Innovación y Empleo del Ayuntamiento de Madrid, destacaba ayer algunas de las razones que a su juicio hacen de la ciudad el lugar idóneo para la implantación del clúster. “Somos la tercera metrópoli europea, puerta a Latinoamérica y contamos con una de las mejores redes de movilidad”.
Redondo añadía que el 85% de la inversión extranjera en España se quedó en Madrid el pasado año y ha ensalzado el nivel de las universidades de la región o la seguridad de la ciudad. “Queremos que este sea un punto de inflexión en la relación administración-empresa. Si queremos superar los grandes retos, tenemos que ir de la mano”.
El profesor de la Universidad de Alicante, Armando Ortuño ha sido parte del proyecto desde el principio cuando, en una fase previa, el Ayuntamiento de Madrid encargó un estudio para radiografiar en qué sectores de futuro merecía la pena cargar las tintas. Ortuño destacaba como guinda del pastel para que el clúster arranque con viento a favor la reciente aprobación –“no podía llegar en mejor momento”- de Madrid Nuevo Norte.
“Será el espacio en el que la ingeniería y la innovación puedan demostrar de lo que son capaces”, argumentaba el profesor, para quien el distrito se convertirá además en un espacio atractivo para que muchas empresas de primera línea instalen su sede, al calor de la ciudad inteligente y de numerosos servicios de valor añadido.
En la definición del Plan Estratégico de ‘Madrid Capital Mundial de la Construcción, la Ingeniería y la Arquitectura’, Ortuño señalaba cómo contaron con todos los agentes importantes de los sectores involucrados, “también con profesionales españoles que trabajan en el extranjero”.
Esta recopilación de información les llevó a Estados Unidos. En Washington y Nueva York se vieron con empresarios, con el ICEX y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Todos ratificaron a Madrid como la candidata idónea para llevar a buen puerto la iniciativa, consolidar mercados e ir con paso más firme a otros donde la empresa española opera con más tibieza como el chino o el africano. “También porque no hay ninguna ciudad española de referencia en la materia”.
Puntos fuertes
Una vez constituidos los distintos grupos de trabajo, ha llegado el momento de establecer prioridades entre las medidas que el proyecto quiere sacar adelante.
Entre las mismas están trabajar para que la capital se convierta en referencia y sede de la Corte de Arbitraje Internacional del sector de la construcción o tejer una red de universidades internacionales marcadas por la excelencia, con la Universidad Politécnica de Madrid en el centro. Esta alianza incluye la promoción del talento, el intercambio de información y una dotación de premios que se entregarían en Madrid.
El clúster estimulará el mercado interno y promoverá que las empresas mantengan en Madrid su sede. También empujará la internacionalización con asesoría a través de una ventanilla única y, según lo anunciado ayer, generará la mayor feria del sector del mundo. En mayo de 2020 tendrá lugar en IFEMA el primer Foro Internacional de Infraestructuras de Transporte, que se celebrará cada dos años.
“Necesitamos nuevos mercados, pero también hacer cosas aquí que se conviertan en referencia internacional”, señalaba Jorge Perelli, presidente ejecutivo de Retineo, una de las entidades del clúster. “Hacen falta seguridad jurídica y estabilidad financiera, pero también promocionarnos tanto dentro como fuera; hasta ahora no hemos sabido”, añadía. “Queremos que Madrid sea el centro de referencia para todo el que quiera construir y reflexionar sobre qué podemos hacer mejor o qué oportunidades hemos dejado escapar. Dentro de 30 años podremos presumir de haber iniciado este proyecto”.
Todo ello revestido por los retos que fija la Agenda 2030, con los ODS como pilar de una nueva forma de construir marcada por la sostenibilidad. Dolores Ortiz, decana del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Madrid llamaba la atención sobre la necesidad de que la ingeniería mire hacia sectores en los que ha puesto menos el foco como la movilidad, el desarrollo urbano o el transporte público.