Manal Ahmed: “Estoy convencida de que debemos aportar algo valioso para la humanidad”

La investigadora egipcia pasará seis meses como científica visitante en el CNIO dentro de la novena edición del programa ‘Ellas investigan - Science by Women’ de la Fundación Mujeres por África
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Manal Ahmed. Imagen: Laura M. Lombardía / CNIO

Nada más comenzar la carrera de medicina, Manal Ahmed se sintió atraída por la inmunología, “porque es como una guerra. Una guerra en la que nosotros combatimos contra virus, bacterias, incluso nuestras propias células; en el cáncer luchamos contra nuestras propias células”. Por eso, esta investigadora del Instituto de Estudios Médicos y Clínicos del Centro Nacional de Investigación (NRC) de Egipto lleva 25 años trabajando en ese campo. Cuando solicitó acudir al Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) en la novena edición del programa Ellas investigan - Science by Women de la Fundación Mujeres por África, sugirió orientar su estancia a profundizar en su propuesta para desarrollar una terapia CAR-T –con modificación de células del propio paciente– que mejore los resultados de este tipo de inmunoterapias en tumores sólidos, en los que solo han alcanzado una efectividad del 29%.

Atacar al tumor desde su entorno            

El planteamiento de Manal Ahmed es conseguir modificar las células inmunitarias del paciente para que ataquen no al tumor en sí, sino a un elemento de su ‘microambiente’ que favorece la progresión tumoral: los fibroblastos. Estas células contribuyen al tejido que conecta los órganos y se ha visto que participan en la resistencia a las terapias CAR-T. “Mi idea es desarrollar una CAR-T contra una de las proteínas que activan los fibroblastos –la FAB–, para neutralizar esa resistencia”, explica Ahmed. Espera que su estancia en el CNIO la ayude a dar los primeros pasos en esa dirección.

Desde su llegada en junio, Ahmed ha conocido el trabajo de la Unidad de Investigación Clínica en Inmunoterapia del Cáncer H12O-CNIO, la Unidad de Anticuerpos Monoclonales, o de la Unidad de Histopatología, “un campo nuevo para mí” y Microscopía Confocal. En septiembre pasará a la Unidad de Diagnóstico Molecular.

Doctora desde niña, karateka y creativa

Movida desde niña por la curiosidad por la ciencia y el esfuerzo para satisfacerla, una profesora de primaria le dio el sobrenombre de “doctora Manal”, adoptado enseguida por todos sus allegados, incluida su propia madre. Decidió estudiar medicina para ayudar a la gente a dejar de sufrir. Sobre todo, a las personas sin recursos que no podían permitirse tratamientos. Quería aprender cómo curarlos”. 

Cuando terminó sus estudios, combinados con la práctica del kumite –combate de competición de kárate–, dirigió su carrera a la investigación, “porque supone el primer paso hacia la medicina. Comienza con una idea borrosa, en la que, paso a paso, se va aclarando la imagen”.  Y lo que más le atrae es el proceso de creación: “Si me planteas un problema, busco todas las herramientas necesarias para resolverla con precisión. Pero si me pides que la repita, igual pierdo el interés”.

Patentes e innovación para problemas sociales

En Egipto, la investigadora ha conseguido dos patentes: una para desarrollar anticuerpos monoclonales contra la aflatoxina B1, una toxina que predispone a los tumores de hígado. Otra por una vacuna contra la bacteria Pseudomonas aeruginosa en pollos. Esta bacteria también infecta a humanos. Suele atacar a personas inmunodeprimidas y con frecuencia causa infecciones en los hospitales.

“Estoy convencida de que debemos aportar algo nuevo y valioso para la humanidad. Eso es lo que busco”, declara Manal Ahmed. También ha trabajado en el desarrollo de kits de diagnóstico para varias enfermedades, como investigadora principal para uno de los proyectos denominados National Challenge Projects (STDF – NCP), un programa del Fondo de Desarrollo Científico y Tecnológico de Egipto, para fomentar soluciones innovadoras surgidas del ámbito científico que puedan aplicarse de manera inmediata para paliar las principales necesidades sociales.

Las inquietudes de Manal Ahmed no se quedan en el laboratorio. A lo largo de su carrera, se dio cuenta de que “los problemas de los hospitales o el mundo de la investigación no eran de carácter técnico. Cuando son técnicos, las personas implicadas en ellos se esfuerzan por mejorar y resolverlos. La mayoría de los problemas tienen que ver con la gestión”. Para entenderlos mejor y poder abordarlos, realizó un máster en administración de empresas (MBA) en la Universidad de Ain Shams (Egipto).

Un lugar para la ciencia africana

Le preocupa que la innovación tarde en llegar a los pacientes y expresa los problemas de su entorno en este sentido: “En los países africanos, muchas empresas se limitan a fabricar genéricos con los productos de fuera ya aceptados en Estados Unidos o Europa –por la FDA o la EMA, respectivamente–. Los accionistas obtienen beneficios fáciles con ellos y, cuando les presentas un producto nuevo, nadie te apoya”. Ahmed considera esencial un cambio de mentalidad “también de las autoridades”.

Como consultora para el organismo encargado de aprobar medicamentos en su país, la Oficina Central de Asuntos Farmacéuticos (CAPA), encontró a menudo que “sus miembros se limitaban a aprobar o renovar la licencia solo en los medicamentos previamente aceptados o renovados por las agencias estadounidenses y europeas. Me he enfrentado a ellos muchas veces exigiendo que realizaran su propia evaluación de las solicitudes. Pero era más joven que ellos, y mujer”.

Por eso, Manal Ahmed considera esencial la formación en liderazgo, comunicación o gestión que también les aporta el programa ‘Science by Women’, así como el intercambio de experiencias y conocimientos entre las beneficiarias del mismo. 

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