Si a algo ha dedicado tiempo y esfuerzo a lo largo de su vida el catedrático Manuel Muñoz es a trabajar en favor de los grupos más desfavorecidos y vulnerables. Su disciplina es la Evaluación y Diagnóstico Psicológico, y el lugar donde la ejerce la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid. Aunque la conversación con él deja clara una conclusión: no todo tiene por qué combatirse desde las aulas o los despachos universitarios, desde los que se echan largas horas a la investigación. “Los medios de comunicación, los gobiernos, las empresas… las personas en general. Acabar con los estigmas depende de todos”.
En este ámbito en concreto, Muñoz ha asumido la responsabilidad de coordinar la Cátedra UCM – Grupo 5 Contra el Estigma, “con una enorme ilusión, y algo de temor”, reconoce, ante la importancia del estigma en la sociedad. Sin embargo, sus 25 años investigando las relaciones entre la salud mental, la discapacidad y la exclusión social lo convierten en una de las voces más autorizadas en este campo.
La Cátedra tiene por objeto colaborar en la eliminación del estigma social –especialmente el que afecta a las personas con enfermedad mental, discapacidad, vulnerabilidad o exclusión social extrema– a través de estudios de investigación, programas de formación, actividades culturales y campañas de sensibilización. Será mañana cuando tenga lugar la presentación oficial de esta iniciativa, dedicada al arte, en la cita Arte Contra el Estigma: una jornada para la inclusión.
Que se haya optado por esta materia no es casualidad. “Queremos demostrar que esta Cátedra no es únicamente de psicología, sino una Cátedra interfacultativa”. Y aunque apenas Manuel Muñoz y su equipo llevan medio año trabajando en ella, el coordinador adelanta que la voluntad es que dure años. “En el caso del arte, hemos visto la mejor oportunidad para luchar contra el estigma y la discriminación. Vamos a reunir a personas que sufren discapacidades pero que ante todo son artistas. Esto es lo que queremos demostrar: que antes que ser personas con discapacidad, son artistas”, subraya.
A pesar de que películas como Campeones parecen haber abierto los ojos un poco más a la sociedad española en torno al estigma social que sufren este tipo de personas, Muñoz considera que “estamos [en España] en un punto de partida bajo respecto a los países punteros, pero en una buena disposición. Ahora es el momento adecuado y ahora sería el momento de iniciar una campaña potente aprovechando todos los medios que tengamos, desde el cine hasta la publicidad”.
A su modo de ver, “España por lo general es un país solidario y abierto, aunque hay algunas corrientes de retroceso que me preocupan”. Por otro lado, reconoce que hay ciertos comportamientos que responden a cierta naturaleza humana, aunque no por ello tengan que pasarse por alto. “Es habitual tener la sensación de que alguien en silla de ruedas es más débil. Esto, indirectamente, también contribuye a generar estigma”. El propio catedrático no niega que “cuando hicimos nosotros el primer estudio de estigma la gente no se sentía cómoda hablando del tema. Es algo que incluso desde el mundo académico tenemos que ir mejorando”.
En otra muestra de compromiso por lograr sus objetivos, el pasado mes de septiembre la Cátedra convocó el I Premio al mejor TFM presentado en cualquiera de los másteres oficiales de la UCM durante el curso 2019-2020 que aborde temas relacionados con el estigma de la enfermedad mental, la discapacidad o la exclusión social. Los trabajos se presentarán entre febrero y octubre de 2020 y el premio está dotado con 1.000 euros. «Estamos muy ilusionados con todo esto. Siempre quisimos crear una plataforma que se saliese de lo estrictamente académico y la Cátedra es una gran oportunidad», concluye Manuel Muñoz.