Hace dos semanas se presentó en sociedad el MareNostrum 5, el último gran proyecto del Barcelona Supercomputing Center (BSC). Allí estuvieron desde el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hasta el director ejecutivo de la EuroHPC JU, Anders Dam Jensen. Pero, como siempre, es Mateo Valero, director del centro, quien, por cercanía, tiene las claves de todo lo que representa este supercomputador, “una de las máquinas más completas y versátiles del mundo” y “la mayor inversión jamás realizada por Europa en una infraestructura científica en España”.
Según unas declaraciones proporcionadas por el centro, Valero cuenta que el BSC ahora tiene un "poderío científico y de transferencia de tecnología que lo hace único en Europa”. “Estamos muy contentos porque tenemos la mejor máquina de Europa”, asegura el experto en supercomputación.
Y es que el MareNostrum 5 cuenta con un rendimiento total máximo de 314 petaflops. Esto es, que es capaz de realizar hasta 314.000 billones de cálculos por segundo. Además, el supercomputador se se añade a otros dos sistemas de la EuroHPC JU -la Empresa Común Europea de Informática de Alto Rendimiento, en español-, Lumi (Finlandia) y Leonardo (Italia), como los únicos tres supercomputadores preexaescala europeos.
“El MareNostrum 5 -continúa Valero- tendrá 10.000 veces más potencia que el MareNostrum 1 con mucha capacidad de cálculo, con mucho almacenamiento dentro, asociado a los procesadores, pero con mucho almacenamiento fuera en discos y en cintas. Tenemos 600 petabytes, eso es muchísimo”. Cabe destacar que, desde el primer MareNostrum, han pasado justo veinte años.
“Con eso nos permiten almacenar grandes bases de datos y con esas grandes bases de datos podemos hacer investigación que antes no podíamos hacer porque no teníamos ni esa capacidad de almacenamiento, ni esa capacidad de cálculo, ni las técnicas de inteligencia artificial que nos ayudan”.
Qué hará el supercomputador del BSC
Valero considera que uno de los campos donde más se va a utilizar el MareNostrum 5 -y, posiblemente, la sueprcomputación en general- es en el campo de los gemelos digitales del cuerpo humano. "Quizás el reto más grande que tenemos a nivel mundial. Entender cómo funciona el cuerpo humano y hacer un gemelo digital que pueda avanzar la medicina”.
De hecho, poco después de la presentación del supercomputador, anunciaron la puesta en marcha de la Iniciativa Europea de Gemelos Humanos Virtuales (VHTs), que apoyará la aparición y adopción de la próxima generación de soluciones de gemelos humanos virtuales en el ámbito de la salud y la asistencia
“Los VHT son representaciones digitales de un estado de salud o enfermedad humana que se refieren a distintos niveles de la anatomía (por ejemplo, células, tejidos, órganos, sistemas de órganos). Se construyen a partir de modelos y datos informáticos y están diseñadas para imitar y predecir el comportamiento de sus homólogos físicos, incluida la interacción con otras enfermedades que pueda padecer una persona”, indican desde el BSC.
Así, el potencial clave de esta tecnología en el ámbito de la salud y la asistencia sanitaria está relacionado con la prevención selectiva, las vías clínicas personalizadas y el apoyo a los profesionales sanitarios en entornos virtuales. Algunos ejemplos pueden ser la formación médica, la planificación de intervenciones quirúrgicas y otros posibles casos de uso en entornos virtuales.
De todos modos, no será el único campo donde trabajará el MareNostrum 5.
“Lo que hacen estos computadores es lo que dicen las personas”
Según Valero, también trabajarán en otros proyectos como Destination Earth, para simular la Tierra, mar y aire y los polos. "Pero además, permitirá esta parte acelerada con la inteligencia artificial seguir con los modelos de lenguaje protegiendo los cuatro idiomas del Estado español. Pero también cualquier idioma”, adelanta.
Asimismo, “nos va a permitir hacer temas como diseño de parques eólicos con una precisión tremenda. Nos va a hacer mejorar cada vez los modelos que tenemos de las smart cities, nuevos materiales… Realmente vamos a seguir haciendo cosas, muchas de ellas de manera mucho mejor. Y algunas de ellas por primera vez”.
En definitiva, para el director del BSC, el MareNostrum 5 “permitirá a los investigadores, como digo yo, soñar con hacer cosas que nunca habrían podido imaginar. Luego claro que es importante el supercomputador, pero más que ello, acabo son las personas. Al fin y al cabo, lo que hacen estos computadores es lo que las personas les decimos que hagan. Y, sin personas, no hay ciencia, no hay ingeniería”.