El 10,4% de los españoles estaba afectado por la diabetes en 2017 frente al 8,7% de 2010. Cinco millones de personas de las que un 43% aún no ha sido diagnosticado (según datos de la Federación Internacional de Diabetes). En Europa, son 55 millones de ciudadanos los que sufren algún tipo de diabetes y 425 a nivel mundial (aunque las previsiones apuntan a 629 millones en 2045).
Con estos números era de esperar que la tecnología jugara sus bazas más pronto que tarde. En 2012, María Jesús Salido y Víctor Bautista, paciente de diabetes tipo 1, lanzaron la plataforma SocialDiabetes con el objetivo de facilitar la gestión integral de la enfermedad. Telemedicina conectada a la una aplicación móvil que almacena la información en la nube, por lo que ésta es accesible en todo momento para los médicos, los pacientes y sus familiares.
Ingeniera de Sistemas de Información por la Universidad Autónoma de Barcelona, Salido explica que ante la ausencia de una cura para la enfermedad, la tecnología es la solución. “La diabetes son datos y por ello la estamos “digitalizando”; para que a través de éstos se pueda trabajar a favor de pacientes y médicos”.
La app registra información relevante para el tratamiento de la enfermedad como la glucosa en sangre, la insulina, los hidratos de carbono, los medicamentos o la actividad física y posibilita calcular la dosis recomendada a partir de estos parámetros, generar alertas, recordatorios y gráficas de seguimiento. “El paciente pude ahora flexibilizar su dieta y evitar complicaciones de salud”, añade la CEO de la compañía.
En paralelo, y a través de
la plataforma, los sanitarios pueden
acceder en remoto y en tiempo real a la información del paciente, una
supervisión para la que utilizan un único tablero de control. “El contacto con
el médico es permanente y agiliza la intervención en caso de emergencia, la
resolución de dudas o los ajustes en la terapia. Combinar los datos del día a
día con la información clínica de la que dispone el médico en el hospital es
una de las grandes transformaciones que aportamos además de proactividad, ya
que hace que no sea necesario esperar hasta la próxima visita a la consulta”.
La plataforma cuenta con más de 160.000 usuarios registrados (45K en España), con el respaldo de las agencias reguladoras y cumple con las regulaciones de calidad (CE Marking, HIPPA, MHRA, ISO 13485 medical device). Para su cofundadora, los resultados obtenidos hasta el momento “son prometedores”. Un análisis retrospectivo de la base de datos de SocialDiabetes determinó que el uso de la solución durante seis meses lleva consigo una caída del 1% al 2% en la estimación del HbA1c (niveles medios estimados de glucosa en sangre/hemoglobina glicosilada) para pacientes mal controlados (A1c inicial superior al 8%).
Como explica Salido, y según la Federación Internacional de Diabetes, “cada caída del 1% en A1c reduce el riesgo de muertes relacionadas con la diabetes en un 21%, las complicaciones microvasculares en un 37% y los ataques cardíacos en un 14%. El estudio también mostró que los riesgos de hipoglucemia e hiperglucemia grave se reducen en un 25 a 40% para los pacientes de Tipo 1 después de medio año de uso de SocialDiabetes”.
12 personas integran la compañía junto a un equipo asesor médico formado por expertos nacionales en diabetes. A principios de 2017 recibieron 1,6 millones de Euros de la Comisión Europea dentro de las subvenciones Horizonte 2020 y acaban de inaugurar sus oficinas en el Barcelona Health Hub para, como apunta Salido, “participar en un entorno de colaboración con otras startups, organizaciones sanitarias, empresas e inversores para potenciar la innovación en salud digital y crear un verdadero centro de innovación”.
Salto internacional
La compañía también se ha establecido en Londres y México con la vista puesta en Chile y Colombia como próximas estaciones. “España nos ha servido para desarrollar el producto y testear el modelo de negocio. Ahora estamos exportando esa experiencia a mercados muy sensibles a la problemática de la diabetes y a estas innovaciones”.
En Reino Unido, tras dos pilotos con el HNHS prevén expandirse al sistema público de salud de la mano de partners locales. En México están trabajando con el Instituto Nacional de Pediatría y Nutrición que les validará dentro del Sistema Público de Salud Nacional con el desarrollo de un estudio clínico, y con la Fundación Carlos Slim están cerrando un proyecto para el seguimiento de la diabetes gestacional en 300 mujeres del estado de Hidalgo.
En su opinión, a la hora de afrontar esta patología crónica juegan a favor del paciente una buena educación diabetológica y herramientas que permitan la autogestión de la enfermedad. “En el mundo existen distintas maneras de gestionar la diabetes a las que hay que añadir diferencias culturales, educativas y de acceso a la sanidad, por lo que la clave pasa por la integración clínica”, señala Salido, para quien otro de los retos tiene que ver con recibir descargas de la app desde 20 países distintos. “Procuramos que, en función de la zona de procedencia del usuario, éste encuentre una herramienta que sea útil, práctica y adaptada a una forma específica de tratar la diabetes. Del mismo modo, la plataforma médica cuenta con funcionalidades adaptadas, para que gestionar la diabetes de sus pacientes, no suponga un difícil y nuevo aprendizaje”.