Matteco: del laboratorio al mercado para democratizar la generación de hidrógeno verde en todo el mundo

Iker Marcaide, CEO y cofundador de la spin-off de la Universidad de Valencia, explica la trayectoria y planes de la compañía (probablemente uno de los próximos unicornios españoles) durante la jornada Innovación y Propósito, organizada por PONS IP
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iker Marcaide, CEO y cofundador de Matteco. Imagen facilitada por la compañía.

“Por ahora me cuesta hablar de Matteco como un caso de éxito, pero en este año y medio lo cierto es que las cosas pintan bien; estamos ilusionados, aunque queda mucho por hacer”. Iker Marcaide resume así las sensaciones que le provocan su proyecto más reciente, del que es CEO y cofundador, y que está llamado a ser parte del selecto grupo de unicornios españoles. Basada en Valencia, la compañía de materiales avanzados desarrolla nuevas soluciones para descarbonizar la economía e impulsar la competitividad del hidrógeno verde.

Spin-off de la Universidad de Valencia, Matteco nació en agosto de 2023 fruto de la unión de fuerzas entre Zubi Labs (Impact venture builder de Zubi Group, presidido por Marcaide) y un grupo de científicos a partir de las investigaciones desarrolladas en el Instituto de Ciencia Molecular (ICMol) de la Universidad de Valencia por el equipo liderado por Gonzalo Abellán, cofundador y CTO de la empresa

“No queríamos que una investigación tan potente acabara en el cajón”

“Me lanzo a cosas de las que no tengo ni idea; mi vida se complica de manera progresiva, pero no queríamos que una investigación tan potente acabara en un cajón”, apuntaba Iker Marcaide durante su participación en Madrid en la jornada Innovación y Propósito, organizada por PONS IP en la sede de Fundación PONS

Matteco encaja con el propósito de Zubi: resolver retos sociales y ambientales para un futuro mejor a través de la creación de empresas y la inversión, sin restarle relevancia a la rentabilidad económica. Lo hace en cuatro áreas de negocio diferentes: emprendimiento, desarrollo de entornos urbanos sostenibles, inversión educación. 

“Nos gusta pensar que los combustibles fósiles tienen los días contados”, ha argumentado Marcaide sobre la motivación que les impulsó a lanzar Matteco. “El problema es que las alternativas renovables, incluido el hidrógeno, son caras. Ese es el gap que hay que superar para generalizar su uso. Sabemos que el hidrógeno puede ser clave para reducir las emisiones globales en un 20 %”, añadía. 

Repensar cómo hacemos las cosas

Tras una década de I+D en el laboratorio, Matteco está prepara para hacer frente al desafío. “La base es innovar; repensar cómo hacemos las cosas”. En una planta de generación de hidrógeno, lo que condiciona en mayor medida el coste de producción son los electrodos y los catalizadores, implicados en las reacciones químicas necesarias. Su tecnología patentada tiene “un gran impacto” ya que nutre de competitividad al hidrógeno verde empleado en su producción materiales novedosos sin derivados del platino (PGMs). 

Estos materiales ofrecen el mejor rendimiento a los electrolizadores, ya que permiten un menor consumo de energía, mayores densidades de corriente y una estabilidad y durabilidad superiores, lo que “revoluciona” la producción eficiente de hidrógeno. “Reducimos los gastos operativos y de capital. No utilizar minerales preciosos, de los que Europa no puede autoabastecerse, es otra ventaja

Una factoría propia en Valencia

Iker Marcaide ha recordado que Matteco ya cuenta con clientes en Asia, Oceanía, EEUU y Europa. En octubre de 2024, la compañía cerró una ronda de inversión de Serie A de 15 millones de euros participada por un grupo de family offices nacionales e internacionales. Entre ellos se encontraban Grupo ASV (España), Napali (Chile) y Zubi (España). 

La inyección de capital se destinará a la inminente apertura y puesta en marcha de una fábrica de catalizadores y electrodos de última generación de 10.000 metros cuadrados en Paterna (Valencia) lo que permitirá a Matteco producir el equivalente a 1 gigavatio (GW) de electrodos por año. Además, la compañía prevé pasar de los 40 a los 100 empleados a lo largo de 2025. 

Aprender por el camino

“Esta experiencia es también un aprendizaje sobre lo que supone moverse del laboratorio al mercado; cómo transformar la ciencia en industria”, exponía Marcaide. La empresa se mueve en una excelencia disruptiva que les obliga a extremar las precauciones vinculadas a la propiedad intelectual (expertise de PONS IP). “No creo que existan en el mundo más de 3 o 4 ‘mattecos’, y cada una tendrá que buscar su espacio", ha asegurado Iker Marcaide. 

Oficinas centrales de Matteco.

El directivo ha avanzado que, aunque hoy tienen situado el foco sobre el hidrógeno, seguirán escalando y explorando nuevos materiales y usos para acometer la descarbonización. "Es una prioridad en las agendas española y europea. No podemos perder de vista la conexión entre los retos medioambientales y sociales. La DANA así lo ha demostrado. Ya son 20 los millones de refugiados a consecuencia del cambio climático. Empiezo a pensar que es un reto no tanto para el planeta como para la humanidad. Y, en particular, es un reto de desigualdad”. 

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