Desde hace un tiempo, concretamente desde que Mark Zuckerberg anunció el lanzamiento de Meta, el metaverso, como concepto, se ha colado entre la sociedad. Pero la realidad es que es una tecnología en la que ya se llevaba tiempo trabajando. Así se demostró en una charla organizada por Actiu en el marco del Madrid Design Festival, donde tres expertos dejaron varias certezas sobre este no tan nuevo entorno.
Así, el metaverso -que, como recuerdan desde la propia Actiu, tiene origen en la novela 'Snow Crash', publicada en 1992 por Neal Stephenson, donde se hace referencia a un mundo virtual ficticio- se encuentra en un proceso de definición, como indicó Edgar Martín-Blas, cofundador y CEO de Virtual Voyagers. “Y eso ocurre porque, al igual que cuando apareció Internet, no se sabía ni para qué servía”.
El metaverso, ahora mismo, es un concepto que viene de una evolución de la realidad virtual y la realidad aumenta que se ha vivido en estos años pero que, de repente, ha agrupado un montón de tecnologías, como blockchain, 5G, criptomonedas y otras que, según Martín-Blas, cierran “un círculo perfecto para crear un nuevo Internet que ya no se base tanto en la información, sino en las actividades. Que se puedan hacer cosas casi físicas en ese nuevo Internet”.
Para él, es un cambio muy radical. Se pasará a unas nuevas tecnologías muy cercanas a la realidad mixta, que, aseguró, vendrá de la mano de Apple. “Hemos trabajado con prototipos y es impresionante. El metaverso no será un lugar paralelo al que vayas, sino que habrá “capas” donde haya un mobiliario que solo exista en un mundo virtual. Eso se hace por las gafas, que escanean en tiempo real todo lo que nos rodea y generan una especie de mapeado. Y por encima, con fotones, pintamos el metaverso”.
Una tecnología que se tendrá que repensar
“Toda la definición que tenemos del metaverso -subrayó Martín-Blas- se va a tener que repensar, porque ya no solo es un mundo tridimensional paralelo, sino que estará en el mundo real”. Hasta tal punto, puso de ejemplo, que Disney lo ha visto y acaba de patentar los parques temáticos mixtos; parques temáticos que tendrán toda su construcción física, como siempre y que, por encima, tendrá capas donde se pueda ver a Dumbo volando.
Esta tecnología está en fase prototipo, pero se está redefiniendo y nadie tiene el foco en lo que será el metaverso, según él. “Lo van a decidir los usuarios, que son los que dirán para qué sirve”.
“Las tecnologías futuristas, como chips en el cerebro y demás, no existen a día de hoy. Hay que pensar que la PlayStation no se está vendiendo porque faltan chips, imagina poner un chip a toda la Humanidad… Hay que separa el futurismo de lo real”. Lo real, a día de hoy, es una realidad virtual de mucha calidad, un mundo en pantalla que puede entrar a esos protometaversos con pantalla -y no están mal-. Y luego un camino hacia la realidad mixta que está a punto de explotar este año, cuando Apple, reiteró, lance su prototipo.
“La tecnología ya está”
Según Daniel García Aranda, fundador de Cryptoavatars, una de las cosas más importantes de los estudios como el suyo es “cómo trabajamos, qué formato tenemos, qué tecnología utilizamos dentro… Y eso, muchas veces, es secreto”. Nadie lo sabe, está guardado bajo llave y, en ese entorno cerrado, está muy bien. Pero si alguien colaborar con la empresa, empieza un problema –“no técnico, porque lo técnico siempre se puede solucionar”, especificó-, sino legal.
“En mi punto de vista, hoy por hoy se puede tener un OpenSource, un metaverso. Pero, hay una capa legal, licencias, que llegarán. Y eso permitirá que poco a poco sea más hablar gente en despachos y acordando acuerdos que tíos programando que puedan hacerlo. Porque la tecnología ya está”.
Por su parte, Sergio García, Branding Bruce Lead en FLOC, consideró que estamos en una época temprana del metaverso. Y que esto es una evolución de Internet. “El concepto metaverso viene de mucho atrás, y nos suena de ciencia ficción porque realmente es de ciencia ficción. Viene de una novela y ahora se ha dado el condicionante de que todas las tecnologías que puedan envolver esta evolución funcionen y se utilicen porque hemos ido aprendiendo por el camino cómo funciona un mail, el WhatsApp, etcétera. A nivel de usuario, hay un nivel de experiencia que hemos ido acumulando y que es necesario para meterte en este nuevo ecosistema”.