Se avecina una crisis económica, social y sanitaria. La Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional o el Foro Económico Mundial ya lo han advertido y Minsait, la compañía de transformación digital de Indra, se ha hecho eco de estos avisos. Expertos en ciudades inteligentes, han tenido que rediseñar su oferta de smart cities para hacer frente a los retos que se avecinan. ¿Cómo serán las ciudades post COVID-19?
“La crisis del COVID-19 está influyendo en la percepción global sobre la necesidad de una ciudad inteligente, sostenible y resiliente. Se está convirtiendo en un acelerador del uso de las tecnologías smart en este ámbito, principalmente con el fin de dotar a las ciudades de herramientas que les posibiliten detectar de manera precoz situaciones similares y, por tanto, prepararse mejor frente al impacto de las mismas, pero también con el fin de mitigar las consecuencias y articular soluciones para gestionar una restauración de la normalidad mediante una vuelta ordenada y segura”, declara Alberto Bernal, responsable de Desarrollo de Negocio de Smart Cities en Minsait.
Según Bernal considera que el concepto de ciudad inteligente se ha demostrado que “está aquí para quedarse”, y situaciones de crisis como la actual «no hacen más que confirmar su relevancia”. Los núcleos urbanos post coronavirus, con o sin estrategias de ciudad inteligente, “tendrán que replantarse el diseño y uso de los espacios, sus modos y usos del transporte público y privado, e incluso el desarrollo de su actividad económica”.
No obstante, para Bernal, «el apoyo en herramientas de analítica, de simulación de escenarios, de sensorización o incluso de concienciación y participación ciudadana marcarán la diferencia en el modo, tiempo y forma en el que volveremos a trabajar, vivir, comprar, desplazarnos y relacionaros con los demás en un entorno de alta densidad poblacional como es el de nuestra ciudades”.
De ahí que Minsait se adelante y haya hecho un “rediseño” de las soluciones. De hecho, ya tenían un amplio catálogo de soluciones directamente relacionadas con el uso de la analítica en la toma de decisiones. “Sin embargo, la situación actual nos obliga a poner énfasis en el eje de la Resiliencia Inteligente o Smart Resilience, rediseñando la capacidad de anticipación y de respuesta de las ciudades y de sus ciudadanos frente a las crisis”.
“Todo ello –continúa–, generando un modelo de resiliencia inteligente para las ciudades y el territorios que utiliza la experiencia pasada para mejorar la toma de decisiones futura a través de la detección temprana de riesgos y amenazas, la respuesta coordinada para establecer prioridades en el corto y medio plazo y, finalmente, la simulación de protocolos de recuperación que permitan activar los mecanismos correctos para una transición, progresiva, viable y segura a la normalidad. En definitiva, permitiendo a las ciudades y a los ciudadanos ser resilientes con el fin de poder resurgir de esta crisis de manera más rápida y más fuerte”.
A Minsait, la cuarentena provocada por el coronavirus le ha afectado, como a todas las compañías. Pero, según Bernal, han sabido adaptarse rápidamente al nuevo entorno, “asegurando la más alta protección de los profesionales y facilitándoles un modelo de conciliación y atención a sus familias con toda su diversidad de casuísticas, al tiempo que garantizamos, como compañía, sus capacidades intactas y su alto nivel de servicio a los clientes”.
Así que han impulsado el teletrabajo, nuevas herramientas digitales y una batería de servicios que ayudan al bienestar y la conciliación con formación, ocio o asistencia médica online. Por otro lado, Minsait ha combinado tecnología y digitalización con soluciones de inteligencia colaborativa para garantizar a las empresas la ejecución de proyectos clave en un entorno de gestión en remoto y facilitar que aceleren su transformación, construyendo un modelo de gestión del negocio en formato digital que perdure.
«Tenemos una gran responsabilidad como tractores de la digitalización, no solo con nuestros clientes directos, sino también facilitando el crecimiento de nuestros emprendedores, potenciando la formación acelerada del talento digital en nuestro país y actuando como líderes de opinión en foros nacionales y europeos”, finaliza Bernal.