Más allá de nombres propios –vivos o muertos–, de ventas de cuadros con cifras espectaculares y de galerías internacionales dedicadas a la compraventa de obras, el pensamiento popular es que el arte no da dinero. Pero en esa ecuación no suelen entrar museos como el Prado, que, junto a la Firma de Profesionales EY, ha lanzado un informe con algunos datos muy relevantes sobre el que estado de la pinacoteca en cuanto a su contribución a la economía española. Según ellos, durante el 2019, han contribuido con unos 745 millones de euros.
El entretenimiento y actividades culturales; el transporte, en especial el de largo radio, y, la hostelería y restauración han sido los sectores que más beneficiados por el Prado. Se “estima en unos 25 millones de euros la contribución directa, unos 607 millones la indirecta y en 113 millones la inducida”. Además, por cada empleo directo en el museo, se generan más de 18 puestos de trabajo indirectos e inducidos en la economía española, generando, solo en el 2018, 9.570 puestos de empleos directos, indirectos e inducidos.
“Esta contribución es 16 veces mayor que el presupuesto total del Museo, [45 millones de euros en 2018], lo que indica la capacidad de generación de actividad económica y bienestar que representa la cultura en nuestro país. Es una satisfacción que, además de todos los valores y funciones en el ámbito cultural y de identidad que tiene la institución, se pueda cuantificar también su incidencia en el ámbito de la economía y el empleo”, ha declarado el director del Museo del Prado, Miguel Falomir.
En el estudio han recogido, además, declaraciones de expertos como Gabriele Finaldi, director de la National Gallery de Londres, que ha alabado la innovación y la transformación del museo durante las últimas dos décadas: “El Prado ha experimentado una magnífica transformación en los últimos 20 años. De ser una gran colección se ha convertido en un gran museo. Las adquisiciones, los programas internacionales, las exposiciones, la investigación académica y posiblemente el mejor departamento de conservación de pinturas del mundo lo han convertido en un jugador verdaderamente importante en el escenario mundial”.
Entre los hitos a destacar, cabe subrayar el compromiso con la cultura y la educación, la promoción y proyección de la cultura en el mundo –y en España–, su sostenibilidad o su innovación. Todo ello le ha permitido cerrar los últimos dos años con superávit (3,3 millones de euros en 2017 y 1,7 millones en 2018) y se prevé que 2019, cuyas cuentas aún son provisionales, también se cerrará con superávit y que esas cantidades “se destinarán a acometer en su momento las obras de reforma del Salón de Reinos”, en las que el Museo se ha comprometido a aportar 10 millones de euros.
Marina Chinchilla, directora adjunta de Administración, ha señalado en la presentación que el impacto de 745 millones de euros en la economía española “proviene del gasto de los proveedores del Museo del Prado y, especialmente, del gasto de los visitantes a la institución”. En concreto, el informe de EY considera que los visitantes del Prado generaron “un impacto económico de 467 millones de euros, correspondiendo a los visitantes extranjeros un 89% de esa cantidad y el 11% a los nacionales, de un total de 3,2 millones de visitantes”.