El Museo del Prado ha vuelto a poner en marcha sus programa educativos ‘¿Quedamos en el Prado?’ y ‘El Prado para todos’, unas plataformas que pretenden llegar a todo tipo de público a través de herramientas didácticas que permitan adaptar el lenguaje de la investigación científica y académica a las necesidades educativas. De este modo, tanto el primero de ellos, cuyos protagonistas serán jóvenes entre 13 y 17 años, como el segundo, dirigido a personas con discapacidad funcional, permitirán una mayor flexibilidad en la exposición de los contenidos, al mismo tiempo que ofrecerán una experiencia multimedia e interactiva relacionada con las colecciones del Museo.
En esta ocasión el habitual colaborador tecnológico del Museo del Prado, Samsung, volverá a financiar la dotación de los educadores, el desarrollo materiales tecnológicos específicos (como aplicaciones y contenidos interactivos) y prestará todo el equipo tecnológico necesario, como tabletas y auriculares. El objetivo, según Samsung: “mejorar la experiencia de los visitantes y potenciar nuevas actividades divulgativas y educativas a través de la tecnología”.
El primero de los programas, ‘¿Quedamos en el Prado?’, pretende que los jóvenes usuarios encuentren en el Museo “un lugar de ocio y aprendizaje”. Así, desarrollarán durante los meses de octubre y noviembre la actividad ‘La música en tus ojos’, que contará con la participación de Edu Ostos (Ed is Dead), dj y productor de la Escuela SAE Institute de Madrid. Este programa propone, con el uso de tabletas, la composición de una pieza de música electrónica a partir de sonidos inspirados en 15 obras de la colección de pintura del siglo XIX del Museo. Cabe decir que tendrán hasta el 22 de septiembre para inscribirse.
En segundo lugar, en ‘El Prado para todos’ se ofrecerán actividades específicas dirigidas a centros e instituciones a los que acuden personas con diversidad funcional y en las que pueden inscribirse desde esta misma semana. “Del trabajo y la experiencia de los participantes surgen diferentes creaciones que se publican en el micrositio ‘La obra que nos falta en el Prado’”, apuntan desde el Museo.