La arquitectura del Museo del Prado sirve como hilo conductor para una exposición permanente en la que, en colaboración con Samsung, aúnan lo tradicional con lo digital. Homenajeando sus 200 años de historia, la pinacoteca trata de acercar al visitante “las transformaciones de esta institución, que es reflejo de la propia historia de España”, aseguran.
Desde el año 1819, cuando, bajo el nombre de Real Museo de Pintura y Escultura, el actual Prado abrió sus puertas con 311 obras, hasta hoy: la exposición permanente representa una reflexión sobre transformación sufrida por el museo, tras muchas vicisitudes históricas y políticas.
Comisariada por Víctor Cageao, director de Inmuebles y Medio Natural del Patrimonio Nacional y, anteriormente, coordinador General de Programación del Museo del Prado, con el apoyo de la documentalista Teresa Prieto, la instalación ocupa las salas 100, 101 y 102, originales de Villanueva, completamente remodeladas según diseño de la arquitecta Desirée González.
“El regalo que España se ha hecho a sí misma”
Miguel Falomir, director del Museo del Prado, ha declarado en la presentación de la exposición permanente que “el Prado es el gran regalo que la nación española se ha hecho a sí misma y nos encanta pensar que para cientos de miles de españoles esta instalación sea casi como un recorrido por la historia de su propia familia”.
“Esta instalación trata de acercar al visitante las transformaciones de esta institución que es reflejo de la propia historia de España. Transformaciones físicas, históricas, políticas y sociales reunidas en una selección de pinturas, esculturas, documentos, maquetas, postales, planos, fotografías, grabados, dibujos, publicaciones y objetos que buscan reforzar el vínculo afectivo de los españoles con su Museo y contextualizar su historia”, ha asegurado.
De este modo, la exposición permanente cuenta con 265 piezas –que incluyen dos obras de Fernando Brambila, procedentes de Patrimonio Nacional–; dos maquetas y un dibujo de Rafael Moneo; una maqueta de Norman Foster; numeroso material documental; siete esculturas; doce monedas y medallas; y cuatro maquetas de nueva factura para este montaje que reflejan las diversas ampliaciones del Museo.
El Prado y lo digital
La conexión con la modernidad la ha puesto el colaborador habitual del Prado, Samsung. Según su director de Marketing, Comunicación y Relaciones Institucionales, Alfonso Fernández, para la compañía es un orgullo poder impulsar esta nueva exposición permanente que incluye obra y experiencia digital. El compromiso con la cultura es un eje fundamental dentro de nuestro programa ‘Tecnología con Propósito’. Por ello, trabajamos para desarrollar proyectos interactivos y multimedia que permitan mejorar la experiencia de los millones de visitantes anuales que tiene la pinacoteca”.
En esta ocasión, han complementado la exposición con una pantalla para disfrutar de la producción audiovisual en 4K y una aplicación interactiva accesible desde tabletas Samsung que cuenta con seis puestos en sala con diferente contenido. La pieza audiovisual, de cinco minutos de duración, combina imágenes históricas del museo, grafismos, ilustraciones vfx, técnicas de modelado y animación 3D para recrear la evolución arquitectónica del Museo desde la construcción del edificio Villanueva hasta nuestros días.
Destacan, además, que la aplicación interactiva se ofrecerá en inglés y español, pero “dada la situación sanitaria actual funcionará momentáneamente sin interacción por parte del visitante. Una vez finalizada la emergencia sanitaria, la aplicación permitirá a los visitantes visualizar información de distintas etapas”.
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