El metano es un gas de sobra conocido; de hecho, es el principal componente del gas natural y se puede encontrar en vertederos, fermentos e incluso el estiércol. El biometano, también conocido como BioGNL, va más allá: con una gran concentración de metano, se obtiene a partir del biogás –que tiene, a su vez, un contenido en este por debajo del 70%– y funciona como un gas natural que es 100% renovable. Y Naturgy va impulsar el primer proyecto de BioGNL en nuestro país.
Por ello, ha firmado el primer contrato de compra a largo plazo de gas renovable en estado líquido –ya que se licúa tras obtenerlo de residuos–. Además, la compañía comprará una producción de 25 GWh anuales de este gas renovable de la planta de valorización de residuos de Sologas en As Somozas (La Coruña), cuya entrada en operación está prevista para finales de 2023. El principal objetivo, entre otros: descarbonizar el transporte, sobre todo el transporte pesado por carretera y marítimo a un coste razonable.
“El gas renovable debe jugar un papel protagonista en la descarbonización del transporte, un sector que concentra casi una tercera parte de las emisiones de gases de efecto invernadero en la Unión Europea”, explica Silvia Sanjoaquín, directora de Nuevos Negocios en Naturgy. “Este proyecto, pionero en España, supone un paso más allá en la búsqueda de soluciones innovadoras para impulsar el biometano como palanca estratégica en la transición energética”.
El BioGNL suele distribuirse mediante camiones a terminales de GNL para ser usado como combustible para el tipo de transporte antes mencionado. Y su producción, según Naturgy, está creciendo rápidamente en Europa por ser “un combustible necesario y de alto potencial para la transición energética que puede ser mezclado con GNL de origen fósil”.
Para qué sirve el BioGNL
El BioGNL, o biometano, es un gas renovable que no solo se está promoviendo desde Naturgy. Además, desde el Ministerio para la Transición Ecológica también se ha divulgado sus características para que las empresas energéticas españolas se atrevan a promover nuevas energías renovables.
La misma administración recuerda que, entre sus principales características, el BioGNL cuenta con una composición química y poder energético muy similares al del gas natural, por lo que puede utilizarse para los mismos usos: ya sea para inyección en la red gasista, mezclado con gas natural para utilizarlo en los sectores calefacción y transporte, o para producir energía eléctrica.
Cabe subrayar de nuevo que es 100% renovable, “ya que el biogás del que procede, pueden originarse a partir de desechos biológicos, cultivos energéticos, lodos de aguas residuales o residuos orgánicos domésticos e industriales”, citan en el informe sobre el biometano.
Por último, entre sus principales características destacan que contribuye al desarrollo de la economía circular como alternativa sostenible al tratamiento de residuos y que favorece la transición energética, contribuyendo así a la constitución de un sistema energético descarbonizado para cumplir con los objetivos de reducción de emisiones de la UE.
Naturgy, por su parte, también añade sobre el BioGNL que “mejora los sistemas de gestión de residuos urbanos, agrícolas y ganaderos, al aprovecharlos para generar energía y evitar una mala gestión del residuo y que no solo abate las emisiones asociadas al sector energético, sino también a las asociadas a la gestión de residuos”, así como contribuir a fijar empleo rural.
En el comunicado de Naturgy anuncian además que la compañía está "dispuesta a desplegar importantes inversiones y recursos en este negocio, teniendo en cuenta el potencial que ofrece España para su desarrollo, con 160 TWh/año, equivalente al 40% de la demanda de gas del país”.