Endesa y Urbaser han presentado en Ponferrada una nueva empresa sostenible. Concretamente, se trata de la primera compañía que llevará a cabo la tarea de recuperación y reciclaje de baterías de litio de la Península Ibérica: Novolitio. Enmarcada dentro del proyecto Futur-e, la empresa seguirá la línea sostenible de proyectos en el Bierzo, donde la energética tenía una planta térmica que actualmente se está desmantelando.
“Esta nueva sociedad que se crea es un paso más en la apuesta de futuro de Endesa en Castilla y León. Novolitio responde a la necesidad actual de disponer de una solución de economía circular para la recuperación y el reciclaje de componentes de las baterías de litio de los vehículos eléctricos, y es una apuesta por el desarrollo sostenible y la protección medioambiental. Estamos seguros que, una vez esté operativa, será un referente en Europa”, ha declarado Miguel Temboury, director general de Endesa Noroeste, en el evento de presentación, realizado este lunes.
Para esta instalación se invertirán 14 millones de euros, y empezará su desarrollo, adelantan desde Endesa, en el segundo semestre de 2023 -en el polígono industrial El Bayo, en la misma Cubillos del Sil, donde estaba la planta térmica-. Además, tendrá una superficie total de 15.000 metros cuadrados, un espacio en el que se reciclarán, aseguran, “alrededor de 8.000 toneladas de baterías al año, generando unos 50 empleos directos para su operación”.
En qué consiste la planta Novolitio
Según explican ambas compañías en un comunicado, la planta de Novolitio “permitirá identificar aquellas baterías que tienen todavía un uso adicional, a las que será posible dar una segunda vida, y para el resto se llevará a cabo un proceso de extracción de los elementos que las componen, valorizando cerca del 90% de todos”.
Esto se hará gracias a “la última tecnología a escala industrial” de ambas compañías, ya que han llevado a cabo un programa de I+D para implantar mejoras con varias soluciones dedicadas a las extracción, el diagnóstico, la descarga y el reciclaje de los componentes de las propias baterías de litio.
De este modo, Novolitio recogerá todas las baterías eléctricas de España y Portugal y las transportará a su planta de Cubillos del Sil. Una vez allí, la idea es tratarlas en las nuevas instalaciones e intentar reutilizarlas. Y, si esto no fuera posible, descargarlas eléctricamente, desmontarlas y someterlas a un proceso de separación y trituración.
Con ello, lo que se consigue es reciclar materiales como aluminio, cobre y plásticos, así como el llamado ‘black-mass’, esa codicia parte, rica en metales estratégicos como el cobalto y el níquel y, en menor medida, litio y manganeso -esenciales para fabricar más baterías-, que tiene un gran valor en Europa. De hecho, también se recuperará el cobre y el aluminio de carcasas y el cableado. Además, subrayan, “el uso de metales reciclados reduce significativamente la huella ambiental de las nuevas baterías haciendo más sostenible su proceso de producción”.
Por último, cabe destacar que Endesa se encargará de liderar el desarrollo del proyecto y Urbaser -que participa en Novolitio a través de Sertego- gestionará las veinte instalaciones de recogida desde las que se suministrarán las baterías a procesar en la planta, además de su operación y mantenimiento.