Ya es común que la realidad supere a la ficción, y esta muletilla ha vuelto a quedar demostrada en el Mobile World Congress (MWC) 2022 que se está celebrando en Barcelona. Sin ir más lejos, este miércoles se dio un ejemplo de ello en la parte educativa. HAZ, Alianza por la Educación, organizó la sesión ‘presente y futuro de la educación: el 5G y sus aplicaciones dentro del aula’.
Esta tecnología de telecomunicaciones, que ha sido presentada desde antes de su nacimiento como el siguiente salto de internet, puede hacer que el sistema educativo cambie su metodología desde la base. Dejando la teoría a un lado, HAZ anunció el lanzamiento de dos proyectos piloto 5G en colegios españoles: el CEIP Gumersindo Azcarate de León y el CEIP Gonzalo Fernández de Córdoba de Madrid.
En ambos se desarrollan desde hace un mes casos de uso basados en la “viabilidad tecnológica y el valor que aportan a las aulas”, concretó Tomeu Sabater, head of digital services de Mobile World Capital. Uno se centrará en la monitorización dentro de estas, con la idea de detectar problemas que puedan tener los alumnos y, además, que el profesorado tenga más información para mejorar su rendimiento.
El otro ofrecerá contenidos volumétricos que solo son posibles con 5G, ya que requieren un gran ancho de banda, como la implantación de Realidad Aumentada (RA) en el sector educativo.
Es lo que llevó a Sabater a hablar del 5G como el siguiente paso “en la digitalización de la educación”. Lo que previsiblemente supondrá un beneficio común para la comunidad educativa: “el alumno tendrá acceso a plataformas de aprendizaje virtual donde y cuando lo deseen. Y también abre nuevas oportunidades a los profesores, a la hora de colaborar con otros docentes o con los estudiantes”, ejemplificó.
Aplicaciones y ética en el uso del 5G
"La tecnología nos permite ir más allá en todos los sentidos, nos permite extender el aula, llevar a cabo experiencias virtuales”. A Carlos Grau, CEO Mobile World Capital Barcelona, presidente de Fundación Mobile World Capital y miembro de la Junta Directiva de HAZ, Alianza por la Educación, no le cabe duda del poder de esta herramienta para la enseñanza.
Si bien la implantación y la generalización de tecnología son imparables, Grau lo celebró con prudencia. “El reto que tenemos siempre es educar para que no hagamos malos usos de esa tecnología. Problemas de ciberseguridad, acoso o bullying pueden haberse derivado de una falta de autoeducación sobre la tecnología. Quizá es una de las áreas que quizá necesiten ser más trabajadas, para empoderar sobre el uso que los humanos hacemos de esta en un centro”, avisó.
Bajo unas pautas claras sobre su utilización, el 5G permitiría un universo de posibilidades. Como visitar un museo sin salir del aula. Estudiar el cuerpo humano en 3D gracias a Realidad Virtual (RV). Aprender geografía sobre el terreno sin levantarse de la silla. O posibilitar experiencias inmersivas en realidades virtuales como el Metaverso.
Es una manera de “democratizar” los contenidos, señaló Jordi Arrufí, program director Mobile World Capital y miembro del Comité Ejecutivo de HAZ, Alianza por la Educación. Además destacó otras consecuencias derivadas de la implantación del 5G, como la co-docencia y la mejora en la comunicación entre centros y familias de alumnos.
Vocaciones STEM
Durante la presentación de HAZ en el MWC se insistió en repetidas veces en una de las líneas a las que más importancia le dan: desarrollar las vocaciones STEM. Porque como indicó Arrufí, se calcula que faltan 75.000 profesionales “solo en el sector de la tecnología”. Uno de los problemas radica en la distancia que se ha creado entre las profesiones tecnológicas y las mujeres.
“Es muy importante generar ese interés, especialmente entre las niñas”, reconoció. Por su parte, Grau cree que poniendo énfasis en demostrar que la tecnología “tiene un propósito”, se conseguirá hacer más atractivas estas vocaciones STEM.
Y desde la plataforma trabajan en estos momentos tanto en este camino de sembrar la semilla STEM entre las jóvenes como en personalizar la educación. Las empresas, fundaciones y asociaciones que componen HAZ, Alianza por la Educación, aseguraron a través de sus portavoces en el MWC que han conseguido “generar contenido, conocimiento y ser influyentes”.
El proyecto piloto 5G en desarrollo en estos dos centros va más allá, según Arrufí. “Generamos y compartimos ese conocimiento y testeamos esas líneas en el aula. El piloto lo va a comprobar en los próximos meses gracias a nuestros partners, que lo pueden hacer posible”.
“No tiene sentido que sigamos con métodos del siglo pasado”
Completaron la presentación representantes de los centros en los que HAZ está desarrollando el proyecto piloto. Alineados con la plataforma en el ideal de educación al que aspiran, tanto Pilar Bahamonde, directora del CEIP Gumersindo Azcarate como Chema González, docente del CEIP Gonzalo Fernández de Córdoba, depositan sus esperanzas en el potencial de la tecnología para la enseñanza.
"No tiene sentido que en el siglo XXI usemos los métodos del siglo pasado”, se mostró tajante Bahamonde. En esta línea, González pidió que la propia formación del profesorado “ahonde en el uso de la tecnología”. Ambos centros forman parte de una red más extensa a nivel nacional que potencia la tecnología en las clases.
Bajo ese espíritu, el comienzo de la pandemia originada con la Covid-19 fue un cambio de paradigma menos drástico. Y además, permitió atenuar las brechas digitales que hubieran podido surgir entre alumnos con distinto perfil socioeconómico. En el caso del ‘Gumersindo Azcarate’, gracias ser una escuela Samsung Smart School, se pudo realizar “desde el primer día” un préstamo de dispositivos.
Pero si en algo ha notado la directora un cambio de paradigma es en la posibilidad de sumar fuerzas entre centros para mejorar. “Gracias a la tecnología podemos tener un mayor conocimiento de nuestros alumnos. Pero sobre todo nos permite compartir experiencias y buenas prácticas entre centros. El trabajo en equipo es la gran oportunidad de la tecnología", concluyó.