Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) han diseñado un nuevo sistema de fachadas que consigue disminuir el consumo energético de los edificios debido a la climatización. En concreto, han logrado controlar el flujo del aire mediante una doble cámara, en una solución que puede aplicarse tanto a trabajos de rehabilitación como de obra nueva. El trabajo, publicado en la revista Energy and Buldings y también ha sido patentado.
Según han explicado desde la Escuela Técnica Superior de Edificación de la UPM, “el tipo de sistema elegido, el diseño y la correcta ejecución de la propia fachada, son aspectos críticos que condicionarán el consumo energético final del edificio”. De hecho, se estima que la climatización puede determinar entre el 40% y el 65% del gasto total del edificio. Además, “en un clima mediterráneo-continental como el que existe en España, en los meses de frío el edificio sufre pérdidas energéticas a través de las fachadas” debido a las bajas temperaturas, mientras que en verano “el edificio obtiene ganancias energéticas” a consecuencia de la radiación solar. En ambos casos, desde este centro han señalado que la climatización “es necesaria en el edificio con el fin de mantener unas condiciones interiores agradables para sus ocupantes”.
Actualmente, las fachadas ventiladas convencionales se componen de una hoja interior, un aislamiento exterior continuo, la cámara de ventilación y las placas de terminación exterior. En este sentido, los investigadores han señalado que las principales innovaciones propuestas por este nuevo sistema de fachadas están en introducir una segunda cámara entre la existente y el aislamiento de la fachada así como el remate superior de la fachada, así como en el remate superior de la fachada, que incluye un sistema de apertura y cierre manual de las rejillas de entrada y expulsión de aire, en función del gradiente de temperatura entre el interior y el exterior del edificio.
Los investigadores han incidido en que se trata, en definitiva, de un sistema que presenta mejoras sobre el sistema convencional. Es decir, que “la investigación realizada pone de manifiesto el potencial de mejora en la eficiencia energética del edificio mediante el rediseño de sistemas constructivos convencionales”.
Dos mejoras
En concreto, este nuevo sistema incluye dos novedades sobre los que se emplean hoy día. Por un lado, reduce las pérdidas y ganancias energéticas a través de la fachada y por tanto también disminuye el consumo energético debido a la climatización. Además, este diseño permite una homogeneización del aire en las cámaras de ventilación, evitando así que los pisos inferiores tengan un confort térmico menor que los superiores.