Ostras: la ciudadanía como gran aliada para reducir el desperdicio alimentario en los supermercados

Ostras entrega al consumidor las riendas para disminuir el problema del desperdicio de alimentos en los supermercados. Como explica Evelien Moriau, líder del proyecto, la idea de la startup es que los consumidores tengan a su disposición una herramienta que facilite el ‘rescate’ de los productos comestibles cerca de su fecha de caducidad e incentivarles por ello.

“Todas las partes implicadas se ven beneficiadas”, detalla Moriau a este periódico. “En el caso de los consumidores, a través de la app Ostras, recibirán en tiempo real descuentos en función de la vida útil de productos ubicados en diferentes tiendas”.

Para obtener el citado descuento, el consumidor debe subir a la app una foto del ticket de compra y de los productos ‘rescatados’ dentro de las 24 primeras horas desde que se efectuó la compra. Una vez validada la información, Ostras reintegrará los descuentos al usuario. La startup también premia el comportamiento de los usuarios, aliados en el mapeo de descuentos en los supermercados. “Los recompensamos con ahorros y Puntos Ostras que pueden utilizar en descuentos o donaciones”.

En el apartado que corresponde al supermercado, Evelien Moriau asegura que Ostras puede ayudar a aumentar los ingresos con pocos esfuerzos. “Contribuimos a que digan adiós al etiquetado manual de descuentos”. La app de Ostras les facilita un informe mensual sobre el comportamiento de los usuarios y el impacto generado.

Todos ganan

“En definitiva, Ostras será el primer partner a escala europea capaz de incrementar el tráfico de alimentos, la gestión de residuos alimentarios y analizar, en este contexto, el desempeño e influencia de los consumidores”. El círculo lo cierran los proveedores de alimentos, a los que Ostras ofrece una radiografía de sus consumidores: quién compra qué, cuándo lo hace, qué efectos tienen determinadas tendencias…

A diferencia de otros competidores, Ostras confía en el poder de las personas para disminuir el desperdicio de comida en los supermercados. Esto, según Evelien Moriau, es un valor clave del proyecto. “No es necesaria una inversión junto al supermercado en software, hardware ni hacer perder el tiempo a los empleados para que la propuesta de Ostras funcione”.

Tecnología

El carácter humano de Ostras no implica que la startup carezca de una componente tecnológica de primer nivel. “Utilizamos inteligencia artificial para validar más rápidamente la información que suben los consumidores a la app. En este sentido, el reto es entrenar nuestros modelos de IA para poder ‘leer’ facturas de diferentes supermercados y conectarlos con una amplia gama de fotografías de productos”.

Además, la tecnología blockchain asegura las transacciones de Puntos Ostras y reduce costes asociados a los pagos. “De este modo también podemos incentivar las donaciones (a organizaciones B-Corp), gracias a un incremento del valor de los Puntos Ostras de un 1,5 entre aquellos usuarios que opten por esta posibilidad”.

El equipo de Ostras quiere lanzar el MVP de la app para consumidores en el último trimestre de 2024 y arrancar con una prueba piloto en 3 supermercados. De este modo, esperan ‘salvar’ unos 100.000 productos con un ahorro estimado de 200.000 euros.

Consejos de emprendedora

En este camino, Evelien Moriau percibe que, a la hora de emprender, lo importante es enamorarse del problema, no de la solución. Y cita un libro, “The mon test”, con el que aprendió a hacerse las preguntas adecuadas para obtener respuestas reales y no aquellas que como emprendedora quería escuchar.

“También es importante priorizar. Crear una startup no es un sprint, sino una maratón. Hay que saber quedarse con lo importante y dedicarle el tiempo que haga falta.  Para los lectores más curiosos, recomiendo una meditación genial (“right to the brim”) sobre este tema en la aplicación “Petit BamBou”, dentro del programa “tales of wisdom”.

La startup cuenta con el apoyo de Madrid Food Innovation Hub, el vivero de empresas del sector de la alimentación impulsado por el Ayuntamiento de Madrid. “Nos han ayudado a tener más visibilidad dentro del sector foodech español. Siempre están dispuestos a escuchar cuál es el siguiente reto y a compartir perspectivas y experiencias previas. Las sesiones semanales con expertos en ámbito de especialización concretos han resultado de gran utilidad para resolver dudas importantes”, apunta Evelien Moriau.