La Fundación para la Seguridad Vial, FESVIAL, ha presentado el estudio ‘El parabrisas y su aportación a la seguridad vial’, en colaboración con Carglass, para conocer el grado de conocimiento, y falsas creencias, que los conductores presentan respecto a las implicaciones para la seguridad vial y la funcionalidad del vehículo que tienen el parabrisas y resto de cristales. Como señalan desde FESVIAL, "pese a que hay un mayor interés en la sociedad en torno a la seguridad, aún queda mucho camino por recorrer para concienciar a la población del vital papel del parabrisas en la seguridad de su vehículo".
El estudio detalla que las lunas del automóvil son un elemento clave para la seguridad, en primer lugar, porque el parabrisas aporta hasta el 30% de la resistencia de la estructura del vehículo y es un elemento clave para evitar el hundimiento del techo en caso de vuelco. Además, la eficacia del airbag del acompañante está condicionada por el buen estado del parabrisas, pues al desplegarse se apoya sobre él, ejerciendo una enorme presión. Por otro lado, los sistemas ADAS de seguridad activa, basados en multitud de sensores, suelen instalarse en el parabrisas y deben ser recalibrados tras una sustitución.
"Al parabrisas no se le ha prestado la atención necesaria", expone Javier Llamazares, director general de FESVIAL, convencido de que "es una pieza clave dentro de la seguridad vial porque soluciona problemas concretos, que es por donde debe ir la seguridad vial para lograr el objetivo final: acabar con los accidentes y los problemas en carretera". Pese a ello, tan solo uno de cada tres conductores conoce las funciones estructurales del parabrisas y que en caso de vuelco, este elemento impide que el techo se hunda. Y cerca del 60% de los usuarios desconoce que el parabrisas afecta al funcionamiento del airbag, y que aloja los sensores del sistema de seguridad activa ADAS, que informan al sistema de alerta de cambio de carril o de frenada de emergencia, entre otras.
A más limpieza, menos accidentes
Los conductores suspenden en visibilidad y limpieza, pues el 75% conduce o ha conducido con las escobillas en mal estado o con el parabrisas sucio, minimizando la visibilidad. Seis de cada diez conductores no comprueba al subirse al coche que su parabrisas esté limpio y permita una buena visión. Respecto al mantenimiento, más de un 70% de los conductores no realiza el cambio de escobillas con la frecuencia recomendada (al menos una vez al año). Por otro lado, un 73% de los usuarios llevaría el coche a reparar inmediatamente en caso de tener un impacto en el parabrisas, eligiendo un 50% de ellos un taller especialista para llevar a cabo este trabajo. También la mitad de los encuestados cree necesario sustituir el parabrisas cuando ha recibido un impacto, no siendo conscientes de que en la mayoría de las ocasiones, se puede reparar. En este sentido, Llamazares avisa de "la necesidad de informar a la sociedad para no cometer errores e incluso gastos innecesarios".