En 2014 Samuel Soria se propuso dar vida a un proyecto donde poder plasmar unos valores sólidos y un compromiso real. Comenzó a vender gafas de diseño moderno y funcional fabricadas casi por completo con plástico reciclado, una propuesta innovadora dentro de un sector – el de la óptica- en el que el uso de estos materiales sigue siendo minoritario. “La idea de crear una gafas ecológicas surge del objetivo de ver el mundo mejor, de una forma más responsable con el medio ambiente y con la sociedad en general”, cuenta el socio y CEO de Parafina.
Plástico reciclado, goma de neumáticos, bambú orgánico, metal reciclado o posos de café, son algunos de los materiales con los que se producen estas gafas. “Cada uno de ellos, aporta unas características diferentes y apreciables”, detalla Soria. El upcycling da una segunda vida a los residuos de los vertederos, contribuyendo a reducir la contaminación y a solucionar la enorme cantidad de basura a la que se enfrenta la humanidad. “La mayor innovación de Parafina es en el ámbito del upcycling con el reciclado de materiales para dar una nueva vida y un valor superior al producto”.
Upcycling para dar una nueva vida y un valor superior al producto
En 2019 se convirtió en la primera marca española de gafas certificada BCorp, demostrando el cumplimiento de los más altos estándares de impacto social y medioambiental. Como líderes de esta economía emergente dentro del sector de la óptica, insisten en que “es necesario que actuemos sabiendo que todos dependemos de todos y que, por tanto, somos responsables unos de otros y de las generaciones futuras”.
El objetivo principal de la marca es llegar a todo tipo de compradores, no solo a los que están concienciados con el cuidado del planeta, demostrando que es posible fabricar una montura con un bonito diseño que tenga un impacto positivo en el planeta. Comercializan gafas de sol polarizadas, de lectura con varias graduaciones, con filtro azul y gafas para niños por un precio de entre 30 y 75 euros. Incluyen también en su catálogo fundas y cordones ecológicos.
"Tenemos un propósito: generar impacto positivo"
“El año pasado, la colección de gafas de sol primavera- verano en su conjunto ahorró 232.813,85 m3 de agua, que equivalen a 2 piscinas olímpicas, 237.397,33 kg de CO2, que equivalen a 218 meses de consumo de electricidad de una casa de 100m2 y 2.944.268,69 millones de julios, que equivalen a 342 vuelos de NY a Madrid (5.764 km)”, detallan desde su web.
Además de esa conciencia ambiental, Parafina cuenta con un proyecto social con el que dona el 5% de la venta neta de cada producto a becas escolares y universitarias a niños de un barrio ubicado a las afueras de Asunción (Paraguay). “Ayudamos en becas para la educación y en mejora de las instalaciones. Nuestro proyecto social queda representado en el packaging de las gafas con un lápiz plantable, símbolo de la educación y el crecimiento sostenible. Tenemos un propósito: generar impacto positivo”, relata Soria.
