Cumplir los imperativos de la Agenda Digital Europea, formar parte activa de la revolución tecnológica, promover políticas públicas que integren en la transformación a grupos menos favorecidos… España tiene ante sí una oportunidad para impulsar los nuevos pilares de una economía global, pero también diferentes retos en los que administración y empresa están obligadas a entenderse.
Representantes de PP, PSOE, Ciudadanos y Podemos debatían esta mañana en Madrid durante la tercera jornada de Digital Enterprise Show (DES) sobre cómo no perder este tren en una conversación marcada por el diferente nivel de intervencionismo estatal que requiere este campo de acción a juicio de cada una de las cuatro fuerzas políticas.
Pilar Marcos, diputada y responsable de Agenda Digital en el Partido Popular, ha defendido la conveniencia de ir de la mano de Europa y ofrecer seguridad jurídica y las mejores infraestructuras posibles, “dos aspectos que ya funcionaban en los tiempos del Imperio Romano”, y ha recordado que “para no quedarnos atrás”, en España “hay que jugar con nuevas reglas adaptadas al ámbito digital”. Cambios legales y fiscales “en un trato equitativo entre el mundo analógico y el digital”.
La propuesta del PP -Marcos ha destacado hitos como el despliegue de fibra óptica o el plan de extensión de banda ancha para universalizar el acceso a Internet en España- ha sido criticada por Francisco Polo, Secretario Federal de Emprendimiento, Ciencia e Innovación del PSOE.
“La Agenda Digital que queremos no es la que acaba de aprobar el gobierno, con un recorte presupuestario del 40% respecto a la última que impulsó el PSOE en 2011”, señalaba Polo, que ha definido la visión socialdemócrata de un estado emprendedor como aquel en el que cualquier persona tenga acceso a la financiación y al conocimiento “y donde las administraciones no sean una barrera sino un aliado para que el talento se quede en casa y podamos atraer talento internacional”. “Una visión”, añadía el responsable socialista, “contraria a la que ofrece un gobierno zombi que tiene al país secuestrado”.
También Podemos ha mantenido la necesidad de un papel más activo del estado en la promoción de políticas de innovación intensivas. El diputado Segundo González incidía en la importancia de que la administración actúe como “correa transmisora para que la digitalización de la economía se traduzca en un incremento de la productividad, estancada desde hace años”, y ha acusado al PP de “falta de visión y de voluntad política para abordar estas cuestiones” algo que a su juicio queda patente también en los presupuestos destinados a I+D+i o en el apoyo a PYMES”.
Unos presupuestos que sí ha defendido José Luis Martínez, del área de Agenda Digital de Ciudadanos, que considera que, aunque queda mucho por hacer en acceso universal a Internet, herencia digital o acceso a los datos, el PSOE “no está en condiciones de dar lecciones a nadie”. Para Martínez, “España llega tarde y mal a las revoluciones. Le ocurrió con la Revolución Francesa y con la Revolución Industrial. Ahora no podemos fallar”.
Martínez ha dejado clara la apuesta del partido naranja por un estado liberal al máximo “que mande señales a los sectores productivos y a los ciudadanos sobre por dónde irán las políticas económicas” pero que deje libre el espacio suficiente “para que cada emprendedor se ponga a prueba a nivel personal”. Esta tesis era corroborada por la responsable del Partido Popular. “No querría estar en un país donde el papel del emprendedor lo ejerza el estado, que debe facilitar las cosas, pero no para sustituir a los empresarios”, señalaba Pilar Marcos.
Segundo González respondía que España debería emprender acciones ambiciosas, que quieran parecerse a lo que Estados Unidos y la Universidad de Stanford planearon durante la Guerra Fría y que hoy se ha convertido en Silicon Valley. “Hay que apostar por poner en marcha polos de innovación, y ahí la responsabilidad del estado es muy alta”.
ACCIONES
La concreción de actuaciones específicas está a mitad de camino en la mayoría de los ejemplos expuestos. Francisco Polo ha anunciado el lanzamiento de la propuesta Bandera, que quiere conectar a administración y al ecosistema emprendedor durante grandes eventos como South Summit, el MWC o el propio DES para apoyar a las startups “cuando más lo necesitan” y atraer inversiones. “En lugar de quitar dinero tenemos que poner mucho más sobre la mesa”. El responsable socialista mencionaba también el proyecto Women Helping Others Achieve (W.H.O.A.!) para apoyar el talento femenino y fomentar las vocaciones STEM entre las jóvenes.
Por su parte, Pilar Marcos ha recordado que, ante las nuevas exigencias de Europa, sindicatos, patronal y gobierno han pactado dotar de competencias digitales básicas, “también muy importantes”, a trabajadores y parados, “con especial énfasis en lo que respecta a mujeres o discapacitados”.
Desde Ciudadanos, José Luis Martínez exponía que las intenciones de su partido pasan un programa electoral en el que la digitalización tenga un peso importante. Tanto es así que la formación presidida por Albert Rivera está gestando la idea de un Ministerio de Transformación Digital, “que no tiene por qué ser un organismo uso, incluso podría no tener funcionarios ni sede física, y que se dedicaría a conectar a todo el ecosistema innovador y emprendedor”, concluía Martínez.