En los últimos años, Galicia va escalando silenciosa pero continuadamente posiciones entre las comunidades autónomas más innovadoras de nuestro país. Ahora, según el Instituto Nacional de Estadística, ocupa la sexta plaza pero no se conforma y quiere más. Ése es el mensaje que transmite Patricia Argerey, actual directora de la Axencia Galega de Innovación (Gain). Doctora en Ciencias Económicas y Empresariales, asumió el cargo con el objetivo de trabajar para impulsar la innovación en esta comunidad y ha contado a Innovaspain cómo piensa hacerlo.
Según diversos indicadores, entre ellos el INE, Galicia es una de las comunidades autónomas que más avanza en el ámbito de la innovación en España. ¿Qué le falta para poder ‘atacar’ ese liderazgo?
Según los resultados de la última encuesta realizada por el Instituto Nacional de Estadística sobre innovación tecnológica, Galicia sigue ocupando el sexto lugar en gasto en innovación en términos relativos (sólo detrás de Madrid, País Vasco, Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía). No obstante, estamos poniendo todo nuestro esfuerzo en incentivar la innovación empresarial a través de numerosos instrumentos como ayudas para desarrollar proyectos de investigación industrial y desarrollo experimental por parte de consorcios de empresas en colaboración con el resto de agentes del sistema gallego de innovación (universidades, centros tecnológicos y organismos de investigación), apoyo a nuestros centros tecnológicos que actúan como dinamizadores de la I+D+i empresarial, o apoyo a la contratación de profesionales de Ia I+D+i por parte de nuestras empresas.
¿Y cuáles los puntos flacos en los que Galicia debe trabajar para erigirse en referente de la innovación?
En el bienio 2013-2015 nuestra Comunidad experimentó un crecimiento del 2,29% en el gasto en I+D sobre el PIB, mientras que en el conjunto del Estado descendió un 3,93%. Además, el gasto en I+D empresarial creció en este periodo en Galicia, siendo la quinta Comunidad Autónoma española con mayor crecimiento en la inversión privada en I+D entre 2013-2015. Por su parte, el gasto público en I+D también aumentó, incrementándose en un 10,4% entre 2013-2015.
Para entender bien el contexto, es preciso explicar las singularidades de nuestro sistema de innovación. Nuestro tejido productivo está constituido en más de un 99% por pymes y micropymes, su especialización mayoritaria se centra en sectores poco intensivos en conocimiento y existe un déficit de cooperación entre los distintos agentes del sistema, especialmente, con agentes de fuera de Galicia.
Hablando de puntos débiles de la I+D+i gallega, durante los años de la crisis Galicia ha perdido 1500 compañías innovadoras. ¿Se puede recuperar de alguna forma ese potencial perdido?
La intensidad de innovación en Galicia se ha mantenido prácticamente constante entre 2011-2015 y la cifra de negocio de productos nuevos o mejorados se incrementó un 5,35% respecto a 2011.
Hemos activado una serie de instrumentos para incentivar el emprendimiento innovador, apoyar la transferencia de tecnología al mercado y la creación de spin-offs y startups innovadoras: desde la puesta a disposición de dos fondos de capital riesgo (a través de Xesgalicia, la sociedad gestora de entidades de capital riesgo dependiente de la Xunta de Galicia) hasta la creación de una Red Gallega de Aceleradoras, en la que hemos invertido 12 millones de euros y nos ha permitido apoyar más de 500 proyectos en los últimos cuatro años.
El presidente Feijoo ha asegurado que la Xunta va a movilizar 1.600 millones en innovación hasta el 2020. ¿Cómo se van a invertir?
Para ejecutar esos 1600 millones de euros, contamos con la Estrategia de Especialización Inteligente de Galicia (RIS3) que define los retos y las prioridades de las políticas de I+D+i de la economía gallega hasta 2020. En concreto, se han identificado tres retos prioritarios: la gestión innovadora de los recursos naturales y culturales; el incremento de la competitividad de nuestro sector industrial; y un nuevo modelo de vida saludable basado en el envejecimiento activo. Por otro lado, la Xunta de Galicia se ha dotado de un Plan Estratégico de Galicia 2015-2020 que promueve un modelo de crecimiento económico basado en la innovación y el capital humano.
En cualquier caso, algo se estará haciendo bien en estos años cuando la inversión en I+D de Galicia (4%) está por encima de la media nacional (2,7%). ¿Cuáles son, a su juicio, los mayores logros de Galicia en materia de innovación?
En Galicia disponemos de un mapa de apoyos que cubre todas las fases de la I+D+i. Desde la puesta en marcha de la RIS3 hemos conseguido movilizar 786 millones de euros destinados a I+D+i y hemos concedido 1700 ayudas. Además, somos pioneros y referente en Compra Pública Innovadora y hemos apostado por la creación de un polo tecnológico e industrial alrededor de los vehículos aéreos no tripulados en Galicia. Además, tenemos sectores muy competitivos como la biotecnología a la que estamos apoyando a través de la Estretegia de Biotecnología de Galicia.
Y otro dato para su análisis: si se mira el gasto en I+D sobre el PIB, Galicia está en décimo puesto con un 0,89%. ¿Hay que reforzar la iniciativa innovadora desde la administración pública, la Xunta en particular?
Desde 2013 el gasto en I+D sobre el PIB en Galicia creció a un ritmo superior al del conjunto del Estado. Desde la Xunta hemos hecho una importante apuesta por promover la innovación desde el lado de la demanda incentivando desde el sector público la Compra Pública Innovadora (CPI). Pasamos de un papel de acompañamiento, como cofinanciadores de la I+D+i, a la administración como cliente lanzador, como comprador de tecnología, con el objetivo de obtener soluciones avanzadas propias para dar respuesta a las necesidades del servicio al ciudadano y dinamizar la innovación en sectores intensivos en tecnología.
En el periodo 2007-2014 Galicia ejecutó cerca del 40% del presupuesto para proyectos de CPI que se ejecutaron en toda España y se estima que en este periodo, 2014-2020, Galicia vuelva a estar en una posición destacada. De hecho, la Xunta de Galicia ha recibido en dos ocasiones el Premio Nacional de Innovación en la modalidad de Compra Pública Innovadora que concede el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.
¿Cuáles van a ser las líneas maestras de su gestión al frente de la Agencia Gallega de Innovación?
Nuestras prioridades seguirán siendo captar y retener talento, apoyar la transferencia de tecnología al mercado y la innovación en las pymes. En cuestión de talento, continuaremos con la apuesta por atraer y retener investigadores excelentes en Galicia y favorecer la contratación de nuevos investigadores, no sólo en las universidades y en los centros de conocimiento sino también en las empresas.
En el ámbito de la transferencia de tecnología, apoyaremos que las buenas ideas que se generen en los centros de conocimiento lleguen al mercado, por ejemplo, a través del programa Ignicia Prueba de Concepto para la valorización y transferencia, o las Unidades Mixtas de Investigación, que agrupan a centros de conocimiento con empresas líderes en su sector para trabajar en proyectos estratégicos para Galicia.
Desde la Agencia hemos tratado de priorizar el apoyo a las pymes y micropymes y para ello ponemos en marcha una orden de ayudas para que éstas desarrollen sus propios planes de innovación. El objetivo es ir extendiendo la base de nuestro ecosistema innovador, sin olvidar que nuestro tejido empresarial está conformado fundamentalmente por pequeñas empresas.
¿Cree usted que los gallegos, por norma general, ven la I+D como un factor generador de empleo?
Es muy positivo que exista la percepción social de que la I+D crea empleo. Lo que es seguro es que se trata de un elemento que mejora la competitividad. En la pasada legislatura a través de los programas de innovación empresarial de nuestro departamento se crearon o mantuvieron cerca de 5.000 puestos de trabajo tanto en centros de conocimiento como en empresas. Esta cifra supone una media anual de 1250 empleos, cuando el personal dedicado a tareas de I+D en nuestra Comunidad en 2015 era de 9.038 (a jornada completa).
¿Qué hace falta para acercar aún más a los empresarios gallegos la necesidad de apostar por la innovación?
Nuestros empresarios son conscientes de la necesidad de apostar por la innovación para ser competitivos. Desde la Agencia Gallega de Innovación contamos con un área centrada en difundir, formar y asesorar a todos los agentes del sistema gallego de innovación en todas aquellas oportunidades de apoyo tanto a nivel autonómico, como estatal e internacional, a los que acompañamos de forma individual. Para ello estamos realizando un esfuerzo para que nos conozcan y colaborando con organismos intermedios que contribuyan a dinamizar la innovación en las pymes.
Pero el tejido empresarial gallego está aún dominado por micropymes que se mueven en un entorno muy local…
Como comentaba anteriormente, estamos instrumentando medidas para apoyar a este tipo de empresas a que desarrollen actividades de I+D+i. Además, a través de la convocatoria de ayudas Conecta Peme, con la que hemos movilizado inversiones por cerca de 102 millones de euros para la realización de 133 proyectos en colaboración en la que participan 518 empresas, la mayoria pymes, o la nueva orden de planes de innovación.
En su opinión, ¿qué sectores y qué factores van a marcar el paso de la innovación en Galicia y qué objetivos concretos hay para esas áreas? Me refiero, por ejemplo, a ámbitos como la biotecnología, etc.
La biotecnología es, sin duda, un sector de referencia por su competitividad y crecimiento. Además, se ha demostrado como una palanca de competitividad para otros muchos sectores, más tradicionales. En este contexto, desde la Agencia Gallega de Innovación hemos impulsado la Estrategia de Impulso a la Biotecnología, en la que hemos invertido 20 millones de euros.
Pero además de la biotecnología, desde la administración hemos hecho una apuesta decidida por el sector aeronáutico, con la creación de un polo tecnológico e industrial alrededor de los vehículos no tripulados en Galicia que conlleva una inversión de cerca de 150 millones de euros y que prevé colocar a Galicia en una posición de salida en la agenda internacional del sector.
Por último, la Xunta de Galicia cuenta con la Agenda Galicia-Industria 4.0 que prevé avanzar hacia la consolidación de la fábrica inteligente, mejorar la competitividad de nuestra industria y su internacionalización.