Abogada y economista de formación, Pilar Roch ha intercalado experiencias de emprendimiento tecnológico con puestos de responsabilidad en grandes corporaciones. Su especialidad es el desarrollo de negocio, que considera la conjunción perfecta entre marketing y ventas, y el compañero indispensable de la innovación para crear compañías del siglo XXI.
Se incorporó en 2016 a ideas4all Innovation como COO y al año siguiente fue nombrada CEO. En su trayectoria ha trabajado para varias compañías internacionales e incluso ha puesto en marcha su propios proyectos, como la fundación, en 2000, de Tanja5 Iniciativas en Internet, empresa que persigue ayudar a otras organizaciones a aprovechar la oportunidad digital y que tiene gran penetración en el sector deportivo y, en concreto, en el hípico; fruto de unas de sus pasiones, los caballos.
1. A lo largo de su trayectoria profesional, ¿qué decisión ha tomado que haya tenido como consecuencia un mayor grado de innovación?
Sin duda alguna, el exprimir y sacar el máximo provecho posible a toda la tecnología disponible en un momento dado, estuviese o no extendido su uso, de cara a mejorar un servicio o experiencia. En 2001, con mi primera startup, Tanja5 Iniciativas en Internet, llevamos a cabo la primera retransmisión por streaming de una competición hípica, dentro del seguimiento web de la competición para la que habíamos sido contratados.
En ese momento había poco ancho de banda y demanda, pero la experiencia fue positiva y logramos innovar en el segmento del seguimiento de competiciones deportivas a través de internet, entendiendo esta no sólo como un simple streaming, sino también como un proceso de mejora de la gestión y el seguimiento del propio evento.
Logramos especializarnos en ello y de hecho no ha sido hasta los Juegos Olímpicos de Londres 2012 cuando he visto una visión similar implantada.
2. ¿Cuáles son las claves para culminar con éxito un proceso innovador?
Depende de lo que establezcamos como medida de éxito, si bien destacaría la capacidad de reinvención como un elemento de valor y común a todo el proceso. En ese sentido, me quedo con la frase fantástica de Ana María Llopis que afirma que “la mejor medida de innovación es el grado de autocanibalización”, una máxima que cada día tratamos de aplicar en ideas4all Innovation.
3. Tres consejos para quienes estén dispuestos a abordar cambios, acciones o procesos innovadores en su empresa o entorno.
Les diría que presten mucha atención a la gestión del cambio. Somos personas, y el cambio se gestiona a través de ellas, por eso pienso que resulta de gran utilidad formarse en las metodologías relacionadas con este campo antes de abordar un proceso innovador.
Además, destacaría el tener cuidado con las modas, ya que el sentido común es siempre la mejor de las recetas. Hay que preguntar e indagar sobre lo que no se sepa o comprenda. No hay que tener miedo a preguntar o incluso a parecer ignorantes cuando queremos innovar.
4. ¿Cuál es, a su juicio, la mayor innovación que ha tenido lugar en los últimos 50 años en todos los ámbitos?
Para mí, la world wide web y todo el desarrollo de la sociedad de la información, por su impacto sobre todas las industrias y parcelas de nuestra vida. Internet ha cambiado la forma en la que trabajamos, consumimos, aprendemos o nos relacionamos, por citar sólo algunos ejemplos.
Su eclosión y posterior democratización nos ha situado a las puertas de un nuevo ciclo que supone una oportunidad y un reto apasionante, y del que todavía sólo hemos visto una pequeña parte.