El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha anunciado que Renfe, en colaboración con Gas Natural Fenosa y Enagás, va a preparar la primera prueba piloto de tracción ferroviaria con gas natural licuado (GNL) de Europa. Además, De la Serna ha asegurado que también será “la primera en el mundo en el sector ferroviario de viajeros con el objetivo de verificar la viabilidad de una solución con potenciales ventajas ambientales y económicas para los tráficos que se desarrollan actualmente con tracción diésel”.
Así, este proyecto de innovación “analizará la viabilidad de la adaptación de vehículos ferroviarios para su funcionamiento con motores y depósitos de GNL y el correspondiente análisis técnico, legal, económico y ambiental para la red ferroviaria española y europea”, explican desde Renfe.
Además, en la institución prevén el desarrollo de la prueba piloto en la primera quincena de diciembre con motor GNL en un tren autopropulsado del parque diésel de Feve en un tramo de unos 20 kilómetros entre la estación de Trubia y la de Baiña con extensión a Figaredo, en Asturias. Para ello, se sustituirá el motor diésel de una de las dos unidades automotoras pareadas por otro que consumirá gas natural para su propulsión y se instalarán los depósitos en los que se almacenará el GNL junto con los elementos auxiliares necesarios.
De este modo, la prueba permitirá contrastar los resultados obtenidos tanto para tecnología diésel como para la de gas, ya que se mantendrá una cabeza tractora con cada tipo de combustible en el mismo tren. De esta prueba en vía se extraerán conclusiones sobre requisitos técnicos de espacio, peso, refrigeración y autonomía para la tracción de gas natural, además de otras consideraciones y variables comparativas en emisiones y economía operativa.
Este proyecto está enmarcado en la Estrategia de impulso del Vehículo con Energías Alternativas (VEA) en España 2014-2020, en línea con el objeto y ámbito de aplicación de la Directiva 2014/94 sobre la implantación de una infraestructura para los combustibles alternativos en Europa. Forma parte también del plan de renovación del material rodante de Renfe, que contempla la incorporación de trenes propulsados por energías alternativas dentro del compromiso de descarbonización de las energías destinadas a la tracción ferroviaria.