Repsol está trabajando para que, en el año 2050, tengan cero emisiones netas. Además, también está apostando por erigirse como líder en la generación de electricidad baja en emisiones en España y Portugal. Es por eso que acaba de lanzar Delta 2, su nuevo proyecto eólico en Aragón –860 megavatios (MW)–, una iniciativa que en la que su filial Repsol Electricidad y Gas construirá 26 parques eólicos.
Estarán a punto a partir del 2023, año en el que empezarán a suministrar electricidad a “1,8 millones de personas, aproximadamente, más que la totalidad de la población de Aragón. Asimismo, la generación renovable evitará la emisión de más de 2,6 millones de toneladas de CO2 al año respecto a la electricidad producida con carbón”, indican en un comunicado.
Por otro lado, fuentes de Repsol explican a Innovaspain que esta estrategia se debe a que la compañía ha decidido "estar a la vanguardia de la transición energética y en junio de 2018, en su actualización estratégica, la compañía apostó por darle un empuje definitivo con una fuerte entrada en el sector eléctrico y en las renovables, uno de los segmentos con mayor crecimiento futuro”.
Según ellos, para hacerlo previeron inversiones de 2.500 millones de euros entre 2018 y 2020 en negocios de bajas emisiones. “Y Repsol es ya una compañía multienergética que ofrece a sus clientes también gas, electricidad y todos los servicios alrededor de la energía. Es una oportunidad y una necesidad para una empresa centrada en el cliente que impulsa negocios rentables bajos en carbono y refuerza su apuesta por la tecnología en la industria, al tiempo que reduce las emisiones en operaciones y productos, guiada por el compromiso con los objetivos globales en la lucha contra el cambio climático”, aseguran.
Cabe destacar que Delta 2 se sumará a otros proyectos renovables que Repsol tiene en marcha en Aragón, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Andalucía y Extremadura: “el eólico Delta, ubicado entre las provincias de Zaragoza y Teruel, cuyas obras empezaron en diciembre y que, con 89 turbinas y 335 MW, se prevé que entre en funcionamiento a finales de este año; el también eólico PI, situado entre Palencia y Valladolid, que tendrá una capacidad total instalada de 255 MW; un parque fotovoltaico en Cádiz (Sigma), de 204 MW; el proyecto fotovoltaico de Valdesolar (Badajoz), con 264 MW; y el también fotovoltaico Kappa, de reciente incorporación, con 126,6 MW y ubicado en Ciudad Real. Además, la compañía participa en el parque eólico flotante Windfloat Atlantic, en la costa norte de Portugal, con una capacidad total instalada de 25 MW, de los que 5 corresponden a Repsol”.
Según la compañía, los activos renovables en desarrollo “suman una capacidad de 2.045 MW, que, junto con los 2.952 MW de capacidad total instalada con los que cuenta actualmente la compañía, consolidan a Repsol como un actor relevante en la generación de electricidad baja en emisiones en la Península Ibérica. Además, la compañía incrementó hasta los 7.500 MW su objetivo de capacidad de generación de electricidad baja en carbono para 2025, lo que supone 3.000 MW adicionales respecto a su anterior meta. A esto se suma el inicio de la expansión en otros mercados para convertirse en un actor internacional relevante en energías renovables”.
La estrategia cero emisiones en 2050 de Repsol
Ahondando en esta línea sostenible, Repsol ha querido situarse a la cabeza y a finales del pasado año, anunció que orientará su estrategia “para ser una compañía con cero emisiones netas en 2050, lo que la convierte en la primera de su sector en fijar esta ambiciosa meta, que pretende limitar el calentamiento del planeta por debajo de los dos grados centígrados respecto a los niveles preindustriales. Este nuevo y más exigente escenario servirá de base para el Plan Estratégico 2021-2025, que Repsol presentará al mercado y a los inversores el próximo 5 de mayo”, declaran estas fuentes.