Nos encontramos en un mundo cada vez más globalizado y complejo que diariamente nos plantea nuevos retos a los que hacer frente. La capacidad humana de razonar, innovar y planificar nos ha permitido superar tales desafíos, pero es cierto que el uso de las nuevas tecnologías lleva ya décadas siendo una herramienta esencial para avanzar como sociedad en todos los ámbitos.
En este contexto de evolución constante ha irrumpido con fuerza un nuevo actor, la inteligencia artificial (IA), el cual ya ha dado buena muestra del gran potencial que tiene para transformar la economía y la sociedad. En este sentido, como era de esperar, el entramado empresarial no ha pasado por alto sus excepcionales cualidades y según el informe 'Uso de inteligencia artificial y big data en las empresas españolas' publicado por el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital en España, el uso de estas tecnologías ha crecido en nuestro país hasta equipararse al de la media europea, alcanzando la decimocuarta posición en la adopción de IA. En concreto, el estudio señala que en España la aplicación de la IA ha aumentado un 3,6% hasta llegar el 11,8% de las empresas de más de 10 empleados, ocho puntos porcentuales en el año 2022 para grandes y un punto porcentual hasta 4,6% entre las microempresas.
Por otro lado, la generación de empleo en este ámbito es otro de los indicadores que pone de relieve su relevancia dentro de la economía del país. En este punto destaca una de las conclusiones del estudio 'Diagnóstico de talento en Data e Inteligencia Artificial en España', elaborado por IndesIA, asociación que impulsa el uso de datos y la IA junto con la compañía Talent Hackers, el cual estima que sólo hasta 2025 esta industria va a demandar hasta 90.000 nuevos profesionales en España.
Los datos nos demuestran que la IA jugará un importante papel durante los próximos años en la gran mayoría de sectores, siendo especialmente relevante su evolución en aquellos que mayor peso tienen en nuestra economía y, en consecuencia, la promoción inmobiliaria no puede quedarse al margen al ser este una de las piezas clave del ecosistema.
La IA en la promoción inmobiliaria
La IA es susceptible de ser aplicada en todo el proceso de promoción inmobiliaria. Desde la compra de suelo a la posventa, puede suponer un valor diferencial para aquellos agentes del mercado que sean capaces de integrar la inteligencia artificial en todos los procesos de su cadena de valor.
Un claro ejemplo, es la búsqueda de suelo, uno de los procesos más tediosos y clave de cualquier promotora. Es sabido por todos, que el suelo finalista es un bien escaso en todo el territorio nacional, por lo que las promotoras que sean más ágiles en este proceso tendrán una ventaja competitiva sin precedentes. En este contexto, gracias a la tecnología Big Data y la aplicación de técnicas de Inteligencia Artificial, se puede realizar búsquedas de suelos teniendo en cuenta la zona y el perfil de los potenciales clientes, analizar la operación rápidamente y en tiempo real, y presentar una oferta que le encaje al vendedor.
También, en la comercialización de una promoción, la Inteligencia Artificial ayuda a dinamizar las ventas buscando en el mercado a los potenciales compradores con más precisión de la que pueden tener los equipos de marketing y comercial que utilicen métodos tradicionales. El objetivo es optimizar al máximo la inversión de marketing y el tiempo de los comerciales, enfocando los esfuerzos en aquellos perfiles a los que realmente les encaja el proyecto y tienen posibilidades reales de comprar. Todo ello, basado en algoritmos de IA que aprendan del comportamiento de los clientes y los potenciales clientes.
En cuanto a la fase de diseño, la utilización de Inteligencia Artificial permite acortar mucho los plazos de entrega de un proyecto arquitectónico, ya que facilita la realización de encajes con una precisión y aprovechamiento de espacios dignas de un buen arquitecto. Además, detecta errores de diseño casi en tiempo real, lo que evita retrasos en obra y sobrecostes. Los modelos de IA aprenden de los proyectos ya realizados por lo que mejora su precisión con el paso del tiempo y se adapta cada vez más a las demandas de los clientes.
Así, en la fase de construcción, una de las de mayor potencial, ya podemos utilizar herramientas basadas en Inteligencia Artificial que mitigan errores y hacen que los equipos sean muchos más productivos. Por ejemplo, desde la gestión de proyectos para analizar todos los datos y realizar ajustes en tiempo real, pasando por la robótica que pueden realizar tareas peligrosas y repetitivas con mayor precisión y seguridad, hasta alcanzar la optimización energética y sostenibilidad aprendiendo del histórico de datos disponible.
La robótica junto con la IA también juega un papel muy importante en la postventa, aplicada a la interpretación de imágenes permite realizar monitorizaciones constantes en la fase de acabamos de los edificios residenciales detectando automáticamente y de manera constante desperfectos en tiempo real. Además, puede coordinar a los distintos oficios para que realicen las reparaciones de la manera óptima posible (basado en la experiencia) para que el cliente no sufra los retrasos en las reparaciones una vez se entregan las viviendas. Todo ello repercute en una mejora en la Experiencia del cliente y un ahorro de tiempo y costes para la promotora.
Esta experiencia del Cliente mejora gracias a la IA en el sector de la promoción residencial. Por ejemplo, con la implementación de chatbots basado en IA, los clientes y potenciales clientes pueden resolver sus dudas de manera rápida y multicanal. Además, un modelo de venta personalizado basado en algoritmos de IA, que aprenden del comportamiento de clientes con perfiles similares, así como una comunicación óptima y proactiva ofreciendo información útil para el cliente a lo largo de la vida de la promoción, son elementos imprescindibles para mejorar su experiencia.
Por último y no por ello menos importante, existen multitud de herramientas basadas en IA que permiten a los empleados optimizar su tiempo, mejorando así su productividad, lo que repercute en disponer de más tiempo de calidad para mejorar procesos que repercutan en una mejor experiencia de cliente, reducción de costes y tiempos de entrega y una mejora en el resultado de la compañía.
Para concluir, podemos decir que la Inteligencia Artificial se puede aplicar en todas las fases de la promoción inmobiliaria, aunque depende de cada compañía cómo aborde la inclusión de este nuevo paradigma dentro de sus procesos, ajustando su uso a sus presupuestos, ya que algunas de las aplicaciones que tiene actualmente la IA requiere de una fuerte inversión. Pero sin duda, es el camino a seguir para competir en un sector muy segmentado, con los precios de construcción tensionados, escasez de suelo finalista y la creciente concienciación por la sostenibilidad y el aprovechamiento de los recursos.
