Sara García Alonso es, probablemente, uno de los mejores ejemplos de mujer STEAM. Un referente valioso para animar a que las jóvenes estudiantes opten por este tipo de materias educativas, no solo por los estudios, sino también por su voluntad de competir profesionalmente. Y cuando digo competir, que no es otra cosa que trabajar para aprender, formarte y aportar lo que sabes, lo digo para crecer y ser ejemplar, que es como se llega a ser un referente.
No es fácil y por eso me llamó la atención la frase con la que tituló Juan Calero la información sobre la intervención de Sara GarcíaAlonso, biotecnóloga, investigadora del CNIO (Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas) y miembro de la reserva de astronautas de la Agencia Espacial Europea (ESA), en la celebración de los 100 años de Merk en España.
Ella ha roto un buen número de esos techos que, aunque no se vean, pesan mucho. Por lo pronto demuestra que la voluntad de crecer profesionalmente y su radical declaración, “siempre es demasiado pronto para rendirse”, merece una especial atención por su capacidad de crear un catalizador didáctico para todos, pero sobre todo para las jóvenes estudiantes.
No hace mucho escribía sobre el déficit de ingenieros que habrá que suplir en los próximos años. La cifra, 200.000, no es cualquier cosa y ese reto hay que alcanzarlo si no nos queremos ver en lo que llamamos Tercer Mundo. Pero no solo hacen falta profesionales relacionados con la ingeniería, también harán falta de miles de investigadores, con multitud de facetas, investigadores como Sara y un largo etcétera que se hayan preparados en esas aptitudes STEAM.
Como referente, la astronauta, bióloga e investigadora debe ser un gran ejemplo para todos los estudiantes de todas las edades pero, sobre todo, entre las niñas. En este momento solo el 5,5 % de las mujeres que trabajan proceden de estos conocimientos, un porcentaje muy pobre. De hecho, los hombres casi triplican este porcentaje. Que, no es que sea tan bueno en conjunto.
La revolución tecnológica que estamos viviendo reclama a personas formadas en conocimientos que hasta son minoría. En todos los sectores que nos podamos imaginar, se necesitan trabajadores que sepan construir las nuevas necesidades de cualquier empresa o profesión. La digitalización ya está presente en toda actividad y no habrá un retroceso. Los retos son innumerables y no vale, como aconseja Sara Alonso, rendirse.
La imaginación y el desarrollo de estas nuevas tecnologías nos va a llevar a situaciones nunca vividas por la especie humana. Lo que era ciencia-ficción y muchos de nuestros sueños ya son realidades. Hay que prepararse; tanto, que hasta la ciencia- ficción que leía en los años 60 y 70 ya es historia. “Siempre es demasiado pronto para rendirse”, y merece la pena pensarlo en este agosto que ya va terminando. Para mi es la frase del año.
