Seur Logística ha puesto en marcha un nuevo centro en Illescas, donde se unificará las operaciones de los centros de Getafe y Alcalá de Henares. De unos 370.000 metros cuadrados, la nave promete ser más segura, más sostenible y más innovadora. Entre sus principales puntos fuertes se encuentra la mejora en las operaciones de Madrid y, por otro lado, que se podrá ampliar la capacidad de almacenamiento del centro hasta en un 40 %.
Este nuevo centro supone también, según fuentes de Seur, “una respuesta a nuestra estrategia de ofrecer un servicio cada vez mejor a nuestros clientes. Al centralizar nuestras operaciones en un enclave estratégico como Illescas, podremos consolidar nuestras operaciones logísticas en un único punto, optimizando la gestión del almacén y las rutas”.
De hecho, sobre la localización de la nave en Illescas declaran que en su apuesta por la sostenibilidad se incluye también "buscar espacios que nos ayuden a conseguir nuestros objetivos y compartan nuestro compromiso con el medioambiente”. “La Veredilla II –subrayan– reúne estas cualidades, y estamos muy contentos de formar parte de este complejo”.
¿Y cuáles son sus innovaciones? Desde la propia compañía destacan la implantación de ‘pick y put to light’, un sistema de clasificación que permitirá una mayor rapidez y eficiencia en los procesos de selección y repart. Pero hay más innovaciones: "El resto de las innovaciones se centran, sobre todo, en la sostenibilidad, ya que se trata también de unas instalaciones que cuentan con el certificado de sostenibilidad en la construcción Breeam Very Good, energía limpia fotovoltaica, un sistema contraincendios con aljibe propio, así como luz natural o, en su defecto, iluminación artificial a través de luces LED, todo en línea con la política de la empresa”.
Asimismo, en cuestión de seguridad, la idea es ofrecer la máxima seguridad a sus clientes. “Por ello, la nueva nave contará con la certificación TAPA que acredita la máxima seguridad de las instalaciones. Se trata de una nave independiente con vallado perimetral, con control de accesos a través del reconocimiento facial, un sistema de lectura de matrículas, un circuito cerrado de TV, analítica de vídeo, alumbrado sorpresivo y audio disuasorio. Y por último, el nuevo centro contará con un área de temperatura controlada que oscila entre los 10 y 20 grados. En definitiva, una serie de innovaciones que permitirán ofrecer el servicio más completo a nuestros clientes”.
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Seur es una filial de DPDgroup –a su vez, filial de la francesa GeoPost–, por lo que en la empresa de paquetería aseguran que siempre han tenido la RSC en su ADN-. “Hace ya cinco años, de la mano de DPDgroup, pusimos en marcha el proyecto DrivingChangeTM, nuestro compromiso RSC que pone foco en aquellas áreas donde podemos tener mayor impacto: reducir y neutralizar nuestra huella de carbono, proporcionar soluciones de entrega urbana más inteligentes y eficientes, impulsar la innovación, y desarrollar conexiones significativas en las comunidades con las que trabajamos”, explican.
“De esta forma, hemos mantenido nuestro liderazgo en el sector consolidando un modelo sostenible, social y medioambiental. Esto constituye una ventaja competitiva para los clientes, ya sean empresa o particulares, que se suman a nuestro compromiso y contribuyen a reducir el impacto ambiental derivado del transporte gracias a nuestros envíos sostenibles”.
La inclusión de la innovación puede ser tanto una adaptación al siglo XXI como una medida de ahorros a largo plazo. Desde Seur piensan que, hoy en día, las compañías deben asumir que la Responsabilidad Social Corporativa es una obligación ética y legal y que, por tanto, se debe situar como eje estratégico en todos los proyectos que lleven a cabo. Que todos los sectores deben contribuir de alguna manera –y, especialmente, los que su actividad conlleva un impacto medioambiental directo–. También el logístico.
“En Seur somos una de las compañías pioneras en España en implementar estrategias de RSC para minimizar nuestra huella de carbono, ya que somos conscientes del impacto ambiental y climático de nuestra actividad. Por eso, las acciones para mitigarlo forman parte de nuestro eje estratégico y es transversal a todos los proyectos”, aseguran. “Además, ser sostenibles se ha convertido en una exigencia cada vez más común tanto por parte de los consumidores, como por parte de las instituciones a todos los niveles, nacional, comunitario a través de la UE y global a través de la ONU, los ODS y la Agenda 2030”.
“Por tanto, esta estrategia responde principalmente a una adaptación a las nuevas necesidades del mercado y la asunción de una responsabilidad que tenemos con la sociedad. Aunque esto no es independiente de una posible optimización de recursos que pueda beneficiar también a la operativa interna”, resumen.