Cuidar la piel frente al sol es fundamental, pero los protectores solares terminan en demasiadas ocasiones como residuo en el océano. La organización medioambiental Green Cross calcula que alrededor de 25.000 toneladas se acumulan cada año en el mar. Lo que ha provocado que algunos destinos vacacionales, como Hawái o las Islas Vírgenes, hayan anunciado la prohibición de ciertas cremas solares para proteger sus arrecifes de coral.
En particular, aquellas que contienen filtros como el oxibenzona, el octinoxato y el octocrileno afectan directamente al medio marino, que sustenta la vida acuática y, a su vez, es una fuente de alimento para los humanos. En España, la situación no mejora. De hecho, Ecologistas en Acción, otorgó por primera vez en 2022 una bandera negra por el impacto de estos productos a la localidad de Nerja (Málaga).
Ante esta alarmante realidad, surgen alternativas como Sol de Ibiza, una marca pionera en protección solar ecológica nacida en 2019 en la isla balear, que lucha contra la contaminación medioambiental. Sus artífices, Alessandro Mancinim, Linda Maroli y Santo Bellistri, decidieron desarrollar una fórmula con ingredientes naturales y orgánicos y crearon una línea de cinco productos de formulación orgánica, vegana, cruelty-free y de residuo cero. “Utilizamos ingredientes 100% naturales y solo el óxido de zinc sin nanopartículas como filtro solar, promoviendo la salud de tu piel y preservando el medio ambiente”, cuenta Agatha Grégoire García, directora de Operaciones y Desarrollo de Negocio de Sol de Ibiza.
Protectores solares con un enfoque sostenible integral
Todos sus productos están certificados por COSMOS ORGANIC o AIAB, asegurando prácticas de producción y procesamiento ecológicas y saludables para los consumidores, así como un uso responsable de los recursos naturales. “Seleccionamos cuidadosamente nuestros ingredientes, dando prioridad a aquellos provenientes principalmente de la agricultura ecológica y de productores locales siempre que sea posible”, explica Agatha.
El compromiso con el medioambiente también se refleja en sus envases, totalmente libres de plástico. “Hemos optado por envases reciclables o de cartón reciclado y compostable”, cuentan desde Sol de Ibiza. Además, sus productos no contienen agua en su formulación, “contribuyendo así a la preservación de un recurso cada vez más escaso al evitar su transporte. El sector cosmético es responsable del consumo estimado de 78 mil millones de litros de agua al año”.
Asimismo, la empresa forma parte de la red global 1% for the Planet y desde su nacimiento dona el 1% de su facturación a Ibiza Preservation Foundation, que promueve la conservación y recuperación del patrimonio natural de Ibiza y Formentera. Desde 2019 ha contribuido con unos 6.000€ a esta causa.
“Cada vez somos conscientes de los beneficios de la cosmética ecológica”
Lo ecológico se ha convertido en un nuevo estándar de lujo, y desde Sol de Ibiza son conscientes de que la demanda de este tipo de productos está en aumento. Sus productos de formulación orgánica ya se venden más de 1.200 puntos de venta físicos de 19 países de Europa, además de en cientos de comercios online, incluido Amazon.
Unas cifras que confirman el buen momento que vive la cosmética ecológica. “A nivel europeo, se espera que en 2024 el mercado de protectores solares orgánicos crezca un 7,8% y que los ingresos asciendan a 104,2 millones de euros en 2026.”, nos cuenta Agatha Grégoire García.
Con respecto España, cada vez somos conscientes de los beneficios de la cosmética ecológica. “La venta de protección solar natural representa un tercio respecto a mercados como Alemania y Francia, pero tiene una tasa de crecimiento prevista de 14% en los próximos dos años”, añade la directora de Operaciones y Desarrollo de Negocio de la marca.
Abierta ronda de financiación participativa con Bolsa Social
Sol de Ibiza ha abierto una ronda de financiación participativa a través de Bolsa Social para conseguir un mínimo de 350.000€ que les permita impulsar su expansión internacional y fortalecer su posición en el mercado. Los fondos se destinarán principalmente al desarrollo de nuevos productos, a reforzar su reconocimiento de marca y al lanzamiento de la firma en Estados Unidos a través de Amazon US. En sus previsiones se incluye también la exportación a países como República Dominicana, Uruguay o Dubái.
Con su innovación constante, enfoque sostenible y lugar en el mercado, su objetivo es posicionarse como la alternativa sostenible de referencia, compitiendo directamente con los protectores solares tradicionales y compartiendo estanterías con las marcas más populares.