Hace 16 años, en un pueblo perdido de los Andes, comenzó el proceso de educación digital en el que se ha convertido ProFuturo. Hoy, su presidente, César Alierta, ha mantenido una charla con Iñaki Gabilondo en la que ha mostrado su visión del proyecto, sus impresiones sobre el futuro y, cómo no, su opinión de la educación digital. El escenario: EnlightED, la recién estrenada plataforma de Telefónica en South Summit 2018.
“Iniciativas como estas son importantes. Si el futuro es digital, hay que hacer una educación digital. Un niño coge una tablet y en un mes ya sabe utilizarla a la perfección. Por eso hay que enseñar a los profesores, que llevan con la misma educación desde el 1992. Así no avanzamos. De eso se deben dar cuenta los que gobiernan y los que mandan. Que no es tan caro educar a un niño”, ha declarado Alierta.
Ante la sorpresa general, Alierta ha matizado: “voy a explicar por qué es barato. En África, educar a un chico desde los 5 hasta los 17 años nos cuesta 230 euros. Si ves las cifras, de los que vamos a educar digitalmente, supone unos 2.500 euros entre 15 años, que son 190 millones de euros al año. Eso no es nada, y hay que tener en cuenta que se hace con millones de personas. Un ejemplo: el gasto militar diario es de 3.000 millones de euros. Reduciendo el gasto militar de un día se pueden educar a 300 millones de niños”.
Del mismo modo, ha lamentado que, aunque haya iniciativas similares a ProFuturo, “deberían haber más”. Según Alierta, educan a unos seis millones de niños –“y para 2020 queremos hacerlo con más de diez millones”. Algo que será más fácil en América Latina que en África. “Los gobiernos de Latinoamérica ya nos conocen, les hemos dado mucho la lata, son más sensibles. Sin embargo, en África es difícil”, apunta. ¿El motivo? La desconfianza. “Desconfían por si les enseñamos ‘nuestros valores’. Y además, cuando vas con estas iniciativas, por ejemplo, al ministro de Educación de Zimbabue, te dice que para qué escuelas digitales, si lo que ellos necesitan son escuelas”.
Todavía falta mucho que hacer. Para Alierta, una de las soluciones para mejorar como fundación pasaría por un mayor apoyo de la Unión Europea. Aunque es difícil “En el año 2009 pensé que debíamos hacer una división digital en Telefónica; la mitad del Comité Ejecutivo no quería hacerlo, no lo veían. Y mira ahora”, ilustra. Y es que, como ha afinado Gabilondo, “estos procesos necesitan perseverancia. No se ven respuestas: ahora se empiezan a intuir las preguntas que traerán soluciones”.
