Desde que nos pusimos en marcha hace 11 años, Innovaspain ha contado, afortunadamente, con un faro que nos ha ido iluminando en este campo, tan poco habitual en lo que era la información sobre la gente y empresas que hacen verdaderos esfuerzos por presentar en el mercado cosas nuevas y atractivas en todos los sectores de la actividad humana. El faro es el South Summit, punto de encuentro anual de todos los que nos dedicamos, de una forma o de otro, a hacer crecer el espíritu de la innovación.
Y desde esa tribuna Carme Artigas, secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, ha dicho que, en este campo de la actividad innovadora “España ya no es la que era”, y tiene toda la razón. Coincide esta afirmación con nuestro record de páginas vistas a lo largo de un mes, en este caso el de mayo, en el que hemos alcanzado casi un 50% más de las páginas vistas en todo el año 2015.
Nos queda mucho por recorrer, pero se agradece escuchar lo positivo, que es lo que anima. El siempre recordado presidente de los Estados Unidos John F. Kennedy dijo que “el mayor enemigo de la verdad no es, muy a menudo, la mentira deliberada, artificial y deshonesta, sino el mito persistente, persuasivo y poco realista”. Regodearnos en los siglos de oscuridad que siguieron a la pérdida del Imperio y sacar la bandera de aquel “que inventen ellos”, tres palabras que utilizamos normalmente fuera de contexto, pero que reflejan el olvido, menosprecio o críticas hacia el éxito, palabra que explica la innovación.
Ya no es lo que era. Ahora sabemos que la innovación es el producto de un proceso que exige investigación, trabajo, dedicación, reconocer los errores, en ocasiones perder dinero, pensar, leer, conocer y un sinfín de superaciones, a veces poco enseñadas y, en consecuencia, escasamente comprendidas. Quedémonos, pues, con este mensaje de Carme Artigas y con lo que significa, que no es otra cosa que seguir trabajando.
En la inauguración del South Summit decía el alcalde de Madrid José Luis Martínez-Almeida que “Madrid es la ciudad donde las cosas suceden”, y hablaba de la acumulación de talento y está bien que lo diga porque, afortunadamente, se distribuye por toda la geografía. En estos días nos centramos en Madrid, pero no hace mucho fue en Málaga, o Barcelona, Valencia o Bilbao; y en lo que resta de año tendremos que señalar más ciudades, como Sevilla, Alicante, Salamanca, Vigo o Teruel. El cambio de estos últimos años ha favorecido el creer en el talento y, en consecuencia, a vivir una ola de innovación a la que tenemos que seguir subidos.
