Cuando Perú quiso que todas las aldeas y lugares más escondidos del país tuvieran una mínima conexión a la web nació Internet para Todos. La idea, surgida de Telefónica Open Future, ha hecho que más de 2.000 comunidades en zonas alejadas hayan podido mejorar su conexión con proyectos de innovación, beneficiando al mismo tiempo a más de 700.000 personas. Una iniciativa exitosa que solo buscaba que todos tuvieran las mismas oportunidades. Pero, ¿y si Internet para Todos se replicara, no solo en Latinoamérica, sino en el resto del mundo?
Esa es la semilla del Call Global 2019 Internet para Todos, impulsado ahora por el departamento de Innovación de Telefónica, que busca propuestas para conectar zonas rurales aisladas y remotas por todo el mundo, haciendo que la conexión, sobre todo a la red móvil, sea la mejor posible. Esta iniciativa supone, además, “una importante oportunidad de negocio”: no solo amplía sus horizontes más allá de Perú, sino que pueden cubrir estas zonas con infraestructura propia, así como implantar un proyecto “sostenible y responsable para reducir la brecha digital”.
El propio director de Innovación de Telefónica, Gonzalo Martín-Villa, explica que Internet para Todos es “un innovador proyecto de negocio abierto a la colaboración con terceros, con empresas y otros organismos que comparten el objetivo de cerrar la brecha digital a través de la conectividad”. Por otro lado, asegura que ya están trabajando con diferentes partners tecnológicos analizando propuestas tecnológicas innovadoras pues quieren “ampliar el marco de colaboración para afrontar los próximos desafíos tanto comerciales como de inclusión digital”.
Cualquiera puede presentarse a la iniciativa, tanto como idea, proyecto o startup hasta el próximo 30 de junio. Los planes deberán versar sobre soluciones sostenibles destinadas a dos desafíos principales: el primero, obtener datos reales y fiables de cualquier zona aislada del mundo que sea “radicalmente distintas al entorno urbano durante etapa previa al despliegue de banda ancha. Conseguir reunir un conjunto de datos veraces ayudará a decidir hacia dónde llevar la conectividad y cómo”; el segundo, una vez conectada la zona, deberá acelerar su adopción y estudiar su impacto en las personas. Básicamente, “que la comunidad se desarrolle tanto a nivel social como económico y medioambiental”. Buscan, en definitiva, “el mismo espíritu colaborador que caracteriza el modelo de innovación abierta de Telefónica”, explica el director de Innovación.
A cambio, ofrecen a los ganadores de la iniciativa un espacio de trabajo durante un periodo de entre tres y seis meses en alguno de los hubs de innovación y emprendimiento disponibles –actualmente en 16 países– y que geográficamente se adecuen por proximidad al proyecto seleccionado (siempre sujeto a la disponibilidad de dichos espacios). Asimismo, todos los proyectos seleccionados contarán con cursos de mentorización y seguimiento de los proyectos seleccionados, impartido por miembros del equipo de Internet para Todos.
Además, “los proyectos seleccionados se difundirán y promocionarán públicamente en nuestros canales de comunicación, tanto a nivel nacional como internacional, así como sus avances y su implementación”, indican desde Telefónica. Y, en caso de validarse técnicamente la solución ofrecida por expertos de Internet para Todos, y habiendo interés comercial por parte de estos, se ofrecerá la posibilidad de realizar un piloto comercial valorado con hasta 100.000 euros. Dicho piloto también tendrá una duración de entre tres y seis meses. Por último, cabe destacar que, de resultar satisfactorio para Telefónica el piloto comercial, se estudiará la posibilidad de incluir el producto en el catálogo de Telefónica.