Telefónica ha renovado el acuerdo de colaboración que tenía con Fortinet desde hace 15 años, debido en parte a los nuevos retos que derivan del auge de tecnologías como el cloud o el Internet de las Cosas. A través de ElevenPaths, filial de ciberseguridad de la compañía española, las dos empresas ofrecerán ahora nuevas soluciones integradas en los servicios “clave” de seguridad; la mayoría creados por ElevenPaths y otros, como Redes Limpias, exclusivos de la marca Telefónica.
“Hoy en día, nuestros clientes se enfrentan a una escasez de talento en el ámbito de la seguridad, así como a estrictas regulaciones y requisitos de cumplimiento de normativa. Todo esto se agrava debido a un entorno de ciberamenazas en constante cambio. Para tener éxito, nuestros clientes necesitan recurrir a socios que les ayuden a implementar los procesos y la tecnología necesaria”, explica Pedro Pablo Pérez, CEO de ElevenPaths y responsable principal de la seguridad de Telefónica. Aseguran que, con este nuevo acuerdo, las dos compañías ofrecerán “una nueva forma de seguridad integral e inteligente que contempla y protege entornos distribuidos, con la que pueden construir y aplicar una política de seguridad consistente y sin fisuras tanto en entornos de red local como cloud, así como sobre arquitecturas avanzadas”.
Por otra parte, Patrice Perche, vicepresidenta de Ventas y Soporte Internacional de Fortinet, considera que “este nuevo acuerdo es resultado de un objetivo común: ofrecer a los clientes las tecnologías de seguridad que necesitan para proteger y hacer crecer sus negocios”. Ahora que Telefónica está ampliando su área de cobertura, su oferta de servicios de red y su base de clientes, Perche cree que necesitan un socio en seguridad para ayudarle a mantener un alto rendimiento escalado sin interrupción del negocio.
El Internet de las Cosas y el cloud computing están creciendo a pasos agigantados, lo que puede convertirse (además de en un beneficio) en un serio problema para la red. Este acuerdo mejora, entre otras cosas, a cualquier hardware y software avanzado que permita la comunicación directa entre las soluciones de seguridad para una respuesta a las amenazas rápida y unificada. Esto es: más seguridad, mayor rendimiento y una mejora en la rapidez de las soluciones, que siempre será única, acabando así con las distintas respuestas que puedan llegar a tener otros servidores de seguridad.