Hace unos años nació en Barcelona, una ciudad con graves problemas en la calidad del aire, Urban Air Purifier (UAP). La idea surgió, simplemente, al respirar. Los residentes de la capital catalana salen a hacer ejercicio día a día, circulan con sus coches y notan cómo su respiración es cada vez más compleja. Fatigas, dolor de cabeza y una amenaza: es el llamado “asesino silencioso” porque la contaminación provoca ictus, problemas pulmonares, degeneraciones neurológicas... Se ha convertido en una de las principales causas de muertes. “Y nadie habla de ello”, afirma Mateo Cusí, responsable de desarrollo de negocio de UAP.
“Empezamos a investigar y vimos que las únicas soluciones eran la Agenda 2030, el Objetivo 2050, descarbonizaciones de empresa, pasar a la movilidad verde, pero conviviendo todavía con el problema durante muchos años. Así que en 2016 empezamos a desarrollar la solución. Investigamos, decía, para ver qué hacer de forma inmediata, paliar el problema ahora. La sociedad empezaba a tener esos problemas de salud y queríamos una solución”, explica Cusí a este periódico. Y así nació UAP.
El dispositivo UAP
“El dispositivo es un sistema de filtración de aire que tiene unas rendijas en la parte inferior lateral del dispositivo”. Para que la gente lo conozca sin verlo, deberían pensar en la marquesina de la parada del bus, donde se pone la publicidad. Es un tamaño similar, por el lateral inferior y los agujeros, las llamadas tuberas, se impulsa el aire renovado y saludable.
Por otro lado, dentro del equipo el dispositivo tiene fases varias de filtración para tratar micropartículas, todo tipo de gases como partículas (PM1, PM2.5, PM10), nitrógeno (NO, NO2, NOx), dióxido de azufre (SO2) y compuestos orgánicos volátiles (COV).
“La verdad es que podemos tratar cualquier tipo de patógeno contaminante. Lo que hacemos es generar un flujo de aire, una corriente que lo que hace es reciclar el espacio donde se encuentra. Se puede instalar de forma sencilla, y nuestros sistemas están enfocados hacia grandes espacios, como un centro comercial, oficinas, hospitales, espacios públicos como estaciones de metro, aeropuertos, incluso en la calle, en paradas de autobús”.
De la pandemia a la actualidad
La crisis provocada por el coronavirus fue un boom para la compañía. La pospandemia, en cambio, fue “un momento complicado”. Sin embargo, tuvieron la suerte de que, como la empresa nació antes del estallido de la pandemia, ya había un enfoque claro: “ofrecer la solución enfocada a la salud y al cuidado del medioambiente. Volvemos a recuperar el mensaje previo. Y haber sufrido esta pandemia ha ayudado a que la gente siga preocupándose la calidad del aire”, asegura Cusí.