De la mano de la startup española SmartDegrees, la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) ha anunciado que ya dispone de los primeros títulos universitarios registrados y certificados a través de la tecnología del blockchain. De esta forma, se confirma una tendencia al alza en el ámbito universitario que busca ofrecer seguridad y agilidad tanto a los alumnos como a los propios centros.
Matilde Sánchez, la vicerrectora de Relaciones Internacionales y Cooperación de la UC3M, ha explicado que para usar este nuevo sistema, los estudiantes deben haber solicitado primero su título, de tal modo que se trata de un servicio adicional. “Para ello, a través de la plataforma proporcionada por SmartDegrees, se crean los correspondientes smart contracts del titulado y del título, y se registran en la red de múltiples nodos validadores de la red blockchain soporte”. Así, a través de una app, “el usuario acede a dichos registros, bajo el control del titulado, que, a partir de este momento, es el único propietario soberano de los datos, sin depender de terceras partes”.
Un proyecto “muy innovador” que, a juicio de Sánchez, supone “de los primeros registros de títulos oficiales universitarios en blockchain en España”. La idea es extender este sistema de forma progresiva al resto de títulos oficiales a lo largo de los dos próximos cursos académicos.
VENTAJAS PARA UNIVERSIDADES Y ALUMNOS
La vicerrectora de la UC3M ha destacado que para los centros, el blockchain garantiza la inviolabilidad del documento así como la desintermediación ya que no sería necesario acudir a proveedores de servicios de certificación, “con el consiguiente ahorro de costes y simplificación del proceso”. Asimismo, otra ventaja para las universidades es que “facilita la adopción de la tecnología blockchain en otros servicios diferenciales adicionales, como podrían ser reconocimiento automático y transferencia de créditos, aprendizaje por competencias, etc”.
En cuanto al alumno, Sánchez ha destacado que el blockchain hace que el titulado sea “propietario de sus datos y los puede compartir dónde y quién decida”, lo cual redunda en su privacidad y seguridad. También ayuda a los recién titulados a “certificar que han finalizado sus estudios sin necesidad de presentar el título en papel” y pone en valor el título “en el mercado de trabajo y en la sociedad, al permitir su compartición ágil y cómodamente con otras partes, como plataformas de trabajo, empresas reclutadoras y otros, gestionándolo desde su smartphone”.