Los sensores disponibles en los smartphones pueden servir de gran ayuda para la detección precoz de los infartos cerebrales. De hecho, son la base en la que se ha apoyado un grupo de investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) para diseñar una aplicación móvil capaz de analizar la capacidad de sonreír, la coherencia en el habla o la movilidad de los brazos del usuario. Si la aplicación, aún en fase de prueba, detecta fallo en dos o tres de estos parámetros, envía de forma automática un mensaje de alerta a emergencias.
Jaime Lloret, uno de los investigadores de ese trabajo publicado en el International Journal of Information Management, ha explicado que "a pesar de las campañas de concienciación realizadas por diversos organismos, muchas personas no son capaces de reconocer los indicios de esta afección". Sin embargo, los smartphones pueden ser grandes aliados en este sentido. Constituyen, ha incidido, “una buena plataforma para el desarrollo de aplicaciones enfocadas a la salud, y en este caso a la detección precoz de una patología que solo en España afecta cada año a 120.000 personas".
Para detectar síntomas de un posible infarto cerebral, la aplicación se basa en tres factores. El primero consiste en detectar la sonrisa del usuario a través de la cámara del teléfono, ya que en caso de infarto cerebral, puede paralizarse un lado de la cara, impidiendo al paciente sonreír con normalidad.
El segundo paso consiste en usar el altavoz y el micrófono del móvil. "Se le pide al usuario que repita una oración sencilla. En caso de que la oración no se repita de forma coherente, la aplicación detecta la presencia de este síntoma", ha indicado Lloret.
Y, por último, la aplicación detecta si usuario es capaz de levantar los brazos gracias al acelerómetro del teléfono. En caso de infarto cerebral, es habitual que no se pueda levantar los dos a la misma altura. no poder levantar uno de los brazos a la misma altura que el otro.
Una vez realizadas estas tres pruebas, la app indica qué tareas se han superado de forma satisfactoria y en cuáles, por el contrario, se ha fallado. Así, si se detectan dos o más errores, contacta con emergencias y envía un mensaje a un contacto predefinido del usuario. El prototipo se ha desarrollado para teléfonos con sistema operativo Android.
BASE DE DATOS PARA COMPRENDER LA ENFERMEDAD
Por otro lado, la aplicación ideada desde la UPV también puede crear un registro, de tal forma que almacene información útil en una base de datos que después sirva para obtención de estadísticas. "Estas podrían ser empleadas por instituciones públicas, contribuyendo así a aumentar el conocimiento sobre los casos de infarto cerebral de la población", ha concluido Lloret.
Según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), el ictus es hoy en día la segunda causa de muerte en España, y la primera entre las mujeres. No en vano, se espera que su incidencia aumente en los próximos 25 años un 27%.