La multinacional española Repsol y la estadounidense LLOG Exploration Offshore han firmado este lunes un acuerdo de participación conjunta e intercambio de activos para acelerar varios proyectos en aguas profundas del Golfo de México estadounidense, ha informado la compañía española.
El acuerdo comprende los bloques 642, 643, 686 y 687, situados en la zona del Keathley Canyon, e incluye la ejecución de un pozo de delineación en León, un descubrimiento realizado por Repsol en 2014. La española se suma también al proyecto Moccasin, situado en el bloque Keathley Canyon 736, en el que LLOG es el operador.
Con el nuevo acuerdo, LLOG se convierte en operador de León –situado a unos 320 kilómetros de la costa de Louisiana y a una profundidad de aproximadamente 1.800 metros de lámina de agua– con una participación del 33 % en el proyecto, mientras que Repsol tendrá una participación del 50 %. En el acuerdo se planifica la ejecución de un pozo de delineación en la segunda mitad de 2019.
Repsol adquiere también una participación del 30 % en el descubrimiento de Moccasin, ubicado a más de 1.900 metros de lámina de agua, en el que la empresa norteamericana mantiene un 31,35 % y la posición de operador.
El director general de Upstream de Repsol, Tomás García Blanco, considera que la compañía ha establecido una "sólida relación con LLOG" en los proyectos que hasta ahora han realizado juntos. "Estamos convencidos de que contamos con el socio perfecto para desarrollar estos activos de una manera eficiente", ha agredado.
Con esta alianza, las compañías esperan acelerar y mejorar la eficiencia operativa de los proyectos. La cercanía entre los descubrimientos de Leon y Moccasin, situados a cerca de 30 kilómetros de distancia, y la experiencia adquirida en Buckskin por parte de las dos, situado también en un área cercana del Golfo de México, ofrecen la posibilidad de simplificar la estructura operativa de estos activos, según ha informado Repsol.
Este acuerdo se da en el marco de la estrategia seguida por Repsol en sus operaciones de Upstream, el área especializada en desarrollar metodologías para reducir la incertidumbre y aumentar la tasa de éxito de los proyectos, que garantiza la sostenibilidad del negocio a largo plazo, independientemente de la volatilidad de los precios del crudo y el gas.
Ambas empresas trabajan de manera conjunta desde hace poco más de dos años, cuando en enero de 2017 la norteamericana se convirtió en el operador de Buckskin, un descubrimiento de Repsol situado en los bloques 785, 828, 829, 830, 871 y 872 del Keathley Canyon, a una profundidad de más de 2.000 metros de lámina de agua.
Repsol y LLOG rediseñaron y optimizaron los procesos del plan, con el objetivo de mejorar la eficiencia del plan de desarrollo original, con lo que el proyecto de aguas profundas se convirtió en viable económicamente, según la española, y con el objetivo de comenzar la producción en la segunda mitad de 2019.