Las enzimas cuentan con infinidad de aplicaciones y propiedades ya que, por ejemplo, son muy buenos catalizadores biológicos. No obstante, su presencia en productos de uso diario, también hace necesario su control y, por tanto, el diseño de métodos que sirvan para detectarlas. Es el caso de una nueva plataforma fluorescente desarrollada por investigadores de la Universidad de Córdoba, capaz de detectar de forma más sencilla y ecológica la lacasa, una enzima muy común en champús o dentífricos.
Según ha explicado Miguel Valcárcel, profesor del Departamento de Química Analítica de la Universidad de Córdoba, “la lacasa es una enzima procedente de algunos hongos y bacterias cuya función principal es la de oxidar una gran variedad de compuestos aromáticos”. Así, su potencial para catalizar la degradación de muchos compuestos coloreados, ha hecho que esté presente “en aquellos productos comerciales que persiguen una decoloración del cabello mucho menos agresiva que otros productos químicos y/o una fijación del color del cabello de forma más prolongada, manteniendo la integridad del pelo. A ello se debe su gran interés como decolorantes naturales o en la mejora de la fijación de colorantes”.
Se trata de un nuevo sensor, consistente en una matriz en estado gel obtenido a través de fibras de nanocelulosa. Una de las propiedades de este material sólido es la posibilidad de transformarlo en un gel con sólo añadir agua. Además, el uso de este material supone en sí una innovación, ya que debido a su origen natural, se trata de un material biodegradable, con baja toxicidad y de bajo coste. La forma en la que el gel de nanocelulosa se convierte en un sensor para cuantificar la concentración de enzimas es introduciendo puntos nanométricos de grafeno, que tienen la propiedad de ser muy fluorescentes.
De esta forma, el resultado que se obtiene es un gel que, en función de una mayor o menor fluorescencia, determina el grado de concentración que existe de la lacasa. Es decir, cuanto mayor es la presencia de esta enzima, menor será la intensidad de fluorescencia y viceversa.
Se trata de un método más sencillo y ecológico, han defendido los investigadores, pero también más fiable que los empleados actualmente. Éstos lo que hacen es medir la actividad enzimática, pero éste es un valor que puede estar fuertemente influenciado por factores externos. Asimismo, la matriz de gel creada ha resultado ser un medio idóneo de almacenamiento para la lacasa, por lo que además de un método para detectar concentraciones de esta enzima, esta investigación también ha dado como resultado una plataforma que permite estabilizarla y guardarla manteniendo intactas todas sus propiedades.
Monitorizar y recopilar información
Por el momento, el uso de esta enzima en productos como champús o dentífricos está permitido dentro de unos límites establecidos. Por eso, según ha señalado Valcárcel, el objetivo pasa por “monitorizar los niveles de lacasa y recopilar más información sobre su presencia en otros productos de uso diario”. Es decir, un trabajo de prevención para “anteponemos a un futuro riesgo para los consumidores si su uso se extendiese a otros productos por encima de unos límites máximos establecidos que garantizan su seguridad”.
Finalmente, desde la Universidad de Córdoba han adelantado que, si bien por ahora los esfuerzos se han centrado en diseñar métodos “fiables” para detectar lacasa, “esta plataforma puede adaptarse para reconocer a otras enzimas”.