En el año 2030, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dos de cada tres europeos tendrán sobrepeso. Este trastorno alimentario afecta ya en España al 54% de la población mayor de 18 años. Es por eso que, durante el último año, Unikme ha trabajado para paliar este problema ayudando a conocer la genética de sus usuarios. Antes intentaban conocer sus límites; ahora los combaten.
No abandonan sus anteriores funciones. En Unikme defienden que cada persona es única, y ayudan a descubrir sus capacidades y a orientar sus entrenamientos deportivos a través de un kit que contiene lo necesario para que les manden una muestra de saliva. Y a partir de ahí, analizan qué dice su ADN sobre las posibles capacidades deportivas del cliente.
“La consecución de los resultados deportivos es la suma de genética más entrenamiento. Si tenemos claro cuál es nuestro objetivo, y conocemos nuestra genética, podemos entrenar de manera más eficiente. Los resultados deportivos pueden ser de diferentes niveles, desde introducir el deporte en nuestra vida hasta corren un Ironman”, explica Darío Bengoechea, fundador de Unikme. También apunta que su producto se está diversificando, debido a la creciente preocupación de la población por su sobrepeso. De hecho, según una encuesta realizada por la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO), el 76% de los españoles no están contentos con su peso. Todo un filón para los nuevos usos de su producto.
“Hemos incluido el análisis de genes (como FTO, ADRB3 y PPARGC1A) que son los que condicionan, en torno a un 40%, la predisposición al sobrepeso”, afirma Bengoenchea. Para ello, extraen el ADN de la saliva y lo analizan (“nunca hemos tenido problemas, ya que las instrucciones de las tomas de saliva son muy fáciles”, apunta). Después, buscan información sobre cinco áreas relacionadas con el rendimiento deportivo (contando con el estudio del sobrepeso). En primer lugar, la resistencia, con parámetros relacionados con deportes de resistencia, como la carrera, el ciclismo o la natación: “Analizamos los diferentes aspectos fisiológicos que afectan a estas disciplinas y nos centramos en aquellos que tienen una relación directa con el entrenamiento”. Segundo, la potencia y la velocidad, donde muestran las particularidades relacionadas con disciplinas de velocidad y potencia, como el fútbol, el pádel, o el esquí, así como la tendencia que se tiene a la hipertrofia al realizar un plan de entrenamiento adecuado. En tercer lugar, quizá lo que le interesa más a los clientes, junto con el sobrepeso: las capacidades innatas, aquello para lo que el cuerpo está mejor diseñado.
Aunque no lo conozcamos, nuestro cuerpo también tiene predisposiciones por algunos tipos de lesión. Es el cuarto parámetro que analizan: “el ADN también codifica la estructura de ligamentos y tendones, y de esta estructura va a depender la propensión que se tiene a ciertos tipos de lesiones. El cliente conocerá esta predisposición y podrá poner especial énfasis en la prevención de estas lesiones en las partes del cuerpo más comprometidas en la disciplina deportiva practicada”. Por último, su nueva área estrella: analizan la movilización de grasas. Lo explica el fundador de Unikme: “en función de las variables del código genético se puede tener una mayor predisposición a la acumulación/movilización de grasas y, por ello, tender más o menos a pesar esos kilos de más. Ayudamos a conocer esa predisposición y a ser más eficaz con los planes de entrenamiento. La movilización de grasa también tiene una relación directa con el rendimiento en las disciplinas de resistencia”.
Hace un par de años, Bengoechea, mientras preparaba la Maratón de Madrid, empezó a preguntarse por esta predisposición: algunas personas, entrenando lo mismo, obtenían mejores resultados. De su curiosidad nació Unikme. “Me gustaría que, en el futuro, Unikme siga a la vanguardia de la genética aplicada al deporte y al sobrepeso, habiendo sido capaces de haber introducido la genética como algo habitual en la práctica deportiva y vendiendo en otros mercados además del español”, admite.
