La Comunidad de Madrid ha realizado un estudio que concluye que el riesgo de sufrir una reinfección por COVID-19 se reduce en casi el 60% (59,5%) si se está vacunado. El análisis de situación ha sido desarrollado por el Servicio de Epidemiología de la Dirección General de Salud Pública.
Este departamento ha registrado, desde el 29 de diciembre del año 2020 y hasta mediados del presente mes de enero, un total de 42.291 reinfecciones. De este cómputo, el 90,4% pertenece a la sexta ola (que comienza a considerarse así desde el pasado 18 de octubre).
Aunque durante este periodo epidemiológico el riesgo de reincidencia aumenta 7,5 veces respecto al anterior -la llamada quinta ola-, la mayor parte de los casos analizados actualmente cursan con formas leves. Ello se debe a que el estado inmunitario de la persona se encuentra más protegido al haber estado ya en contacto con el virus, y especialmente debido a la protección que ofrecen las vacunas. En este sentido, los epidemiólogos insisten en que la inmunización evita formas graves de enfermedad y, aunque no impiden la transmisión, sirven para disminuir la infección y la reinfección.
En el 99,6% de los casos totales de reinfección (42.291) la persona ha pasado la enfermedad dos ocasiones, mientras que tan solo 117 (0,42%) lo han sufrido una tercera vez. Además, el estudio revela que la mayoría de estas reincidencias se han producido en la citada sexta ola, y el 62,5% de los afectados no estaban vacunados o solo contaban con una dosis.
Los beneficios del colesterol bueno
Por otro lado, un estudio elaborado por el Servicio de Medicina Interna del Hospital público La Paz y profesionales de centros de salud y de la Gerencia Asistencial de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid ha demostrado que la mortalidad por COVID-19 fue un 25% inferior en aquellas personas mayores de 75 años que mostraban niveles de HDLc, el llamado colesterol bueno, más altos antes de la infección.
Los resultados de la investigación han sido publicados en la revista científica Atherosclerosis. El Investigador Principal es el doctor José María Mostaza, jefe de Sección de Medicina Interna del Hospital Universitario La Paz.
La mortalidad en pacientes infectados con SARS-CoV-2 se debe principalmente a una respuesta inmunitaria exagerada que induce daño pulmonar y vascular. Esto conduce a una insuficiencia respiratoria aguda y a un mayor riesgo de infecciones bacterianas asociadas. Las partículas de HDL, donde viaja el llamado colesterol bueno, transportan diversas proteínas implicadas en la defensa frente a la infección y reducen la tormenta inflamatoria, no solo por COVID-19, sino también en otros contagios.
Un colesterol bueno alto indica probablemente una mayor cantidad de estas partículas y, por tanto, una mayor cantidad de proteínas protectoras frente a la infección. Es posible que fomentar aquellos factores que aumentan las HDL como son el ejercicio físico regular, no fumar, dieta sana, etc., ayude al organismo en la defensa frente a las infecciones en general y por COVID-19 en particular, reduciendo la mortalidad
Por su parte, la baja concentración de colesterol HDL (HDLc) se asocia con un mayor riesgo de mortalidad relacionada con la infección por SARS-CoV-2. En varones se considera bajo cuando está por debajo de 40 mg/dl; en mujeres, por debajo de 50 mg/dl. El objetivo del estudio era evaluar la relación entre los niveles de HDLc previos a la infección y la mortalidad entre pacientes mayores infectados con SARS-Cov-2.