España no solo es Benidorm, Ibiza o Gran Canaria. En el grueso del territorio hay una cantidad ingente de sitios encantadores que se mueren por revivir tras encadenar décadas de abandono. Para los creadores de Vanwoow, ese resurgimiento debe darse a través del turismo de caravana. La plataforma, nacida en 2019, busca visibilizar a más de 5.000 micropueblos (de menos de 500 habitantes) a través de rutas especiales y asesoramiento para recibir a este tipo de viajeros que no solo no deja de crecer, sino que se ha disparado desde que se inició la pandemia.
Manu Guisado lo vivió en primera persona. Antes de fundar la plataforma junto con Auxi Piñero, notó esa indiferencia por los pueblos desde las grandes ciudades. Él es de Las Cabezas de San Juan (Sevilla, 16.300 habitantes). Conoció a Piñero por coincidir en uno de sus viajes, una pasión que ambos comparten. Pero fue justo después de atravesar la provincia de Teruel —uno de los muchos símbolos de la España vacía— que notaron que no había nada de información para las personas que querían visitar localidades en las carreteras secundarias. Guisado lo recuerda así: “Había mucho material para documentarse y preparar un viaje en la costa, pero en estos sitios era imposible”.
El estrafalario nombre de Vanwoow fue la primera opción sobre la mesa cuando se inició el proyecto. Viene de la combinación de van (furgoneta en inglés) y woow (de sorpresa, también en inglés). Aunque Piñero y Guisado tuvieron dudas, estas desaparecieron por completo cuando Ana Galindo, la diseñadora que luego se integraría al equipo, creó el actual logotipo de la empresa. “Nos decidimos inmediatamente por el nombre cuando vimos aquello”, señala Guisado al otro lado del teléfono. En el emblema de la marca resalta una personita en blanco sobre una mancha turquesa. Más tarde se uniría Javier Guisado para completar la alineación del equipo.
Vanwoow funciona como una página y una app. Es decir, si uno entra desde el móvil puede desplegar todo con la misma visibilidad que tendría una aplicación. Guisado destaca la facilidad con la que cualquier persona puede buscar una zona para iniciar una ruta en autocaravana: “Lo que hacemos es un mapa con todos los micropueblos que enseña sus recursos [como los sitios para pernoctar, productos locales, restricciones por la covid-19] al público». Una de las funciones más llamativas dentro de la web es un juego de mesa sobre micropueblos, estilo Monopoly, que surgió durante la campaña de crowdfunding en noviembre de 2019.
Entre las comunidades con mayor presencia dentro de las rutas inteligentes destacan Aragón, Cataluña y Andalucía. Según detalla Guisado, el equipo está buscando nuevas formas de financiación del proyecto, después de iniciarse como una cooperativa sin ánimo de lucro. Pero el futuro le genera optimismo: “Cada vez más pueblos se abren a esta forma de turismo, y más gente se anima a coger la caravana para visitarlos”.