Cofundador de Erle Robotics (adquirida por Acutronic Robotics) y miembro del comité nacional de robótica, Víctor Mayoral Vilches es un ingeniero especializado en este campo, con trayectoria internacional y experiencia liderando proyectos financiados por diversas entidades en áreas como la inteligencia artificial y la robótica modular. Es uno de los diez jóvenes más innovadores menor de 35 años según la revista MIT Technology Review.
Cuenta con dos ingenierías y ha trabajado en prestigiosas entidades, como el centro de Micro-BioRobótica del Instituto Italiano de Tecnología (IIT) o la Fundación de Robótica de Software Libre (OSRF) –desarrollando la segunda generación del Sistema Operativo de Robots (ROS)–. En la actualidad es CTO de Acutronic Robotics, actúa como asesor para diferentes empresas tecnológicas y ejerce el puesto de experto nacional en la ISO representando a España en el desarrollo de una variedad de estándares para robots modulares.
1. A lo largo de su trayectoria profesional, ¿qué decisión ha tomado que haya tenido como consecuencia un mayor grado de innovación?
En mi caso, destacaría dos decisiones. La primera, la decisión de abandonar mi carrera como investigador para centrarme en la industria. Supe que quería resolver problemas reales con un enfoque tecnológico e innovador. Trasladar ideas del mundo académico, la teoría, a soluciones que resolvieran necesidades. Todo esto hizo que tuviera que cambiar. La innovación comenzó conmigo.
En segundo lugar, la decisión de trabajar en uno de los grandes problemas en la robótica: la creación de hardware standard para robots. Es decir, componentes para robots que puedan ser utilizados en cualquier robot. Indistintamente del fabricante. Todo esto desembocó en el Sistema Operativo de Hardware para Robots más conocido como Hardware Robot Operating System (H-ROS).
2. ¿Cuáles son las claves para culminar con éxito un proceso innovador?
Existen muchas. Construir un buen equipo, cometer errores para aprender de ellos, pensar siempre en el cliente final, mantener una visión ambiciosa, unos objetivos globales o pedir constantemente feedback son algunas de las claves. Pero, por encima de todas ellas, destacaría la tenacidad. Los americanos lo definen como “grit”, perseverance and passion for long-term goals. Se refieren a esa pasión por cumplir objetivos y sueños a largo plazo que permite seguir derribando barreras. Una tras otra.
3. Tres consejos para quienes estén dispuestos a abordar cambios, acciones o procesos innovadores en su empresa o entorno
Mi experiencia innovadora es que, por regla general, las iniciativas con éxito comparten una línea común que suele incluir los siguientes tres perfiles:
- El diseñador o la diseñadora: Perfil orientado al usuario final. Que facilite la comprensión y la integración de la solución o el producto en el mercado.
- El innovador o la innovadora: Dinámico, con una visión clara y en muchos casos creativo. Es la persona que ha de marcar el rumbo y ejecutar el cambio, la acción o el proceso.
- El vendedor o la vendedora: Comúnmente conocido también como “el timador”, es la persona que ha de vender la innovación. Conseguir recursos, apoyar al resto del equipo y mantener siempre un contacto directo con el entorno y el mercado.
Es tremendamente complicado encontrar a alguien que comprenda estas tres cosas. De modo que: rodéate bien y hazlo con mucho cuidado.
4. ¿Cuál es, a su juicio, la mayor innovación que ha tenido lugar en los últimos 50 años en todos los ámbitos?
Para mí, sin duda, son los avances recientes en Inteligencia Artificial. Hay quien dice que se trata de la “nueva electricidad”. Es decir, de algo que cambiará el panorama laboral en las próximas décadas.
Las técnicas recientes de Inteligencia Artificial imitan estructuras neurobiológicas ubicadas en el sistema nervioso y permiten entrenar a robots del mismo modo que uno o una enseña a su mascota. Con ellas es posible educar a los robots a través de recompensas y penalizaciones haciendo que sus comportamientos sean más inteligentes y adaptados a entornos cambiantes y dinámicos. Estas innovaciones permitirán que pronto dispongamos de asistentes artificiales que aprendan de sus errores y nos faciliten una infinidad de actividades.