Games for a Living (G4AL) ha presentado recientemente Elemental Raiders, un videojuego que se relaciona con tecnologías como el blockchain y los NFT para cambiar el paradigma del modelo de negocio actual del sector. Este free-to-play para todas las plataformas busca, además de entretener, que sus usuarios puedan ganar dinero. Aun con toda la polémica que rodea a estas tecnologías -sobre todo aplicada a la industria de los videojuegos-, en su presentación han explicado cuál es el modelo de juego y en qué consistirá esa monetización, además de especificar en qué consiste la compañía o sus futuros proyectos.
“El modelo de negocio que pretendemos llevar a cabo desde G4AL es el de, por un lado, ofrecer un videojuego que sea free-to-play [que se puede jugar, al menos de base, de manera gratuita] y, por otro, que cuente con una parte de blockchain”, ha resumido Manel Sort CEO y fundador de G4AL y exdesarrollador en King -el estudio ampliamente reconocido por Candy Crush-.
Así, los llamados ‘farmeadores’ se dedicarían a focalizar su estrategia dentro del juego -un PvP por turnos con diferentes campeones a elegir- en ganar dinero mientras que otros, simplemente, jugarían de manera desinteresada, solo por diversión. “Esto es como cuando te quedas enganchado en el nivel 400 y pico del Candy Crush y quieres pasártelo pero no puedes, por lo que sea. Entonces pagas para que te dejen subir de nivel y poder seguir jugando”, especifica Sort. Ese sería el modelo tradicional hasta ahora. Con la idea de G4AL, pretenden que se pague a jugadores que ya tengan a ese nivel y poder seguir el videojuego sin más problemas.
“Pretendemos que se pague a otros jugadores, que se progrese así, comprando activos. De este modo, nosotros ganamos dinero de dos maneras: la primera, que cuando haya una transferencia nos llevemos una comisión del 2% -en este tipo de proyectos va del 4% al 5%, pero preferimos un mayor dinamismo-; la segunda, que cuando lancemos un NFT de un nuevo personaje que hemos creado se subaste al mercado”, ha explicado.
G4AL y el acercamiento a estas tecnologías
La premisa era muy clara cuando se fundó G4AL: en el mundo había más de tres mil millones de jugadores y solo tres millones -en mayo de 2022 ya son diez millones- operaban en videojuegos de blockchain. “El motivo por el que creíamos que iba a crecer es simple: si puedes jugar a dos juegos igual de divertidos pero en uno puedes monetizar tu tiempo y en otro no, ¿cuál vas a jugar? El que puedas monetizar. Esa era la base del caso de negocio. Teníamos que conseguir este ‘viaje del usuario’ hacia el descubrimiento de juegos que son igual de buenos pero, además, monetizables”, ha reiterado Sort.
Para ello, el plan contaba con tres áreas que han ido cubriendo desde marzo del año 2021, cuando se fundó formalmente. La primera es que sus videojuegos tenían que tener un modelo free-to-play. “Hoy hay juegos que te piden pagos de 200 euros para empezar a jugar. Nosotros lo que queremos hacer es que pueda entrar la gente como si fuera un juego normal”, ha señalado. En segundo lugar, había que poner una “capa” para poder acceder al mundo blockchain para que se pueda aprender sobre esta tecnología. Usuarios “estándares” necesitaban loguear, poner contraseña y ya está, sin necesidad de saber en qué plataforma de blockchain opera -privada, aseguran, con conexión directa a las principales-.
Y, finalmente, un tema técnico muy importante como es el cross-platform y el cross-chain. Los videojuegos de hoy en día se conciben no solo free-to-play como modelo principal, sino cross-platform, esto es, que el juego salga en todas plataformas -móviles, tablets, consolas, PC-. La parte cross-chain es la misma, solo que con blockchain.
“A finales del 2021, el mercado de videojuegos de blockchain ya había despegado”, ha asegurado Sort. “A nivel del tamaño de mercado, es un mercado grande y va creciendo a una velocidad espectacular. Pero, aun así, aunque sea grande, sobre todo en volumen, es muy importante tener en cuenta que el número de usuarios es muy reducido todavía. La preocupación ahora es que hay que estar atento ante tal crecimiento para que no se escape ninguna oportunidad a nivel global”.