Desde que a Galileo Galilei (1564-1642) se le atribuyera a principios del siglo XVII la invención del primer instrumento para medir el cambio de temperatura de los objetos, pasando por Daniel Gabriel Fahrenheit (1686-1736) y su termómetro de alcohol y escala que lleva su nombre, hasta llegar a los actuales indicadores térmicos imprimibles, han pasado cientos de años de desarrollo e investigación.
Llegar al punto en el que se encuentra la sociedad, en donde la información es recopilada por sensores ambientales y donde se obtiene visibilidad y trazabilidad de las condiciones a las que están expuestos los productos en tiempo real, no ha sido una tarea fácil. Los seres humanos han tenido que recorrer un largo camino para poder medir la temperatura en beneficio común.
Una empresa llamada Enterprise Mobile Leader S.L (EmLeader) es quien ahora se encuentra al final de ese camino. De hecho, lleva más de 17 años integrando tecnologías de movilidad de alto rendimiento en los procesos de las empresas y contribuyendo a la mejora de la productividad, calidad, competitividad y atención al cliente.
En qué consiste EmLeader
trabaja en sectores como el transporte, la logística, retail, ecommerce, manufacturing, financiero y otros mercados, y proporciona soluciones tecnológicas de movilidad, de impresión, RFID, voz o firma digital, además de servicios de consultoría y software e integración, entre otros.
Junto a su partner tecnológico Zebra, que se dedica a los sistemas de impresión, comercializa en España una gran cantidad de sensores e indicadores térmicos así como terminales de movilidad, escáneres de códigos de barras e impresoras.
Por otro lado, con la gama de sensores ambientales de Zebra, se puede atender a todas las necesidades de la cadena de frío con un producto integral y soluciones relacionadas que incluyen desde indicadores térmicos imprimibles listos para usar hasta sensores electrónicos que supervisan de manera inalámbrica sus productos de detección ambiental.
Los sensores térmicos y ambientales
Hoy en día, la medición de la temperatura es fundamental para garantizar la seguridad de las personas, los productos y los procesos. En entornos industriales, como plantas químicas o fábricas, es vital controlar y mantener la temperatura dentro de límites seguros para prevenir riesgos de explosiones, incendios o exposiciones a temperaturas extremas.
En sus inicios, los sensores térmicos se utilizaban principalmente en aplicaciones específicas y de alto rendimiento, como en la industria aeroespacial, donde eran necesarios para monitorear y controlar la temperatura en motores, sistemas de propulsión y componentes críticos.
Con el avance de la tecnología, la reducción de costos y la creciente demanda de soluciones de monitoreo y control de temperatura en diversos sectores industriales, el uso de sensores térmicos se ha expandido considerablemente.
Por otro lado, los sensores ambientales para la cadena de suministro son dispositivos electrónicos diseñados para recopilar datos sobre las condiciones ambientales en las que se transportan y almacenan los productos a lo largo de la cadena de suministro. Estos están equipados con una variedad de tecnologías, como sensores de temperatura, humedad, luz, presión y acelerómetros, entre otros, que les permiten monitorear y medir diferentes aspectos del entorno.
En qué sectores se utilizan
son utilizados en la industria farmacéutica para garantizar que estos productos, como medicamentos y vacunas, se mantengan dentro de los rangos de temperatura adecuados. Esto es especialmente importante para los productos que requieren refrigeración o control estricto de la temperatura para mantener su eficacia y seguridad.
En cuanto a la alimentaria, aseguran que los alimentos perecederos, como productos lácteos, carnes, pescados y alimentos congelados, se mantengan en condiciones de temperatura seguras durante su transporte y almacenamiento. Esto ayuda a prevenir la proliferación de bacterias y mantener la calidad y seguridad alimentaria.
También se utiliza en una industria como la de los productos químicos, ya que pueden controlar la temperatura en el transporte y almacenamiento de productos químicos sensibles al calor. Esto incluye productos químicos sensibles a la humedad, productos inflamables y productos que pueden experimentar cambios en su composición química debido a la exposición a temperaturas inadecuadas.
Asimismo, también aseguran que los dispositivos electrónicos sensibles a la temperatura, como componentes electrónicos, circuitos integrados y equipos electrónicos, no se vean afectados por temperaturas extremas durante su manipulación y almacenamiento.
O en logística y transporte, pues permite supervisar las condiciones de temperatura de los productos en tránsito. De este modo, se garantiza que los productos se mantengan dentro de los rangos de temperatura adecuados y tomar medidas correctivas en caso de exposiciones no deseadas.
Todas estas aplicaciones en diferentes industrias implican que los sensores se pueden extender a cualquier sector donde el control de temperatura sea crítico para la calidad, seguridad y eficacia de los productos.
Qué se puede medir
La variedad de tecnologías con las que están equipados los diferentes sensores ambientales de EmLeader como sensores de temperatura, humedad, luz, presión y acelerómetros, entre otros, permite monitorear y medir diferentes aspectos del entorno.
Por ejemplo, para el monitoreo de temperatura, el control de humedad, la detección de impactos, el monitoreo de luz… La integración de sensores ambientales en la cadena de suministro permite tener un mayor control sobre las condiciones en las que se manejan los productos, lo que a su vez puede mejorar la eficiencia, reducir pérdidas y garantizar la calidad de los productos entregados a los clientes. Además, estos datos recopilados por los sensores ambientales pueden ser utilizados para análisis posteriores y optimización de la cadena de suministro.