Zero 2 Infinity, compañía española aeroespacial, ha comenzado a comercializar sus servicios de certificación y validación de componentes y pequeños satélites en el borde del espacio. Así, ya puede elevar pequeños satélites de observación como el de la startup Aistech, dedicada a la detección temprena de incendios.
Utilizando globos estratosféricos monitorizados desde tierra en tiempo real, es capaz de elevar hasta varias toneladas “desde horas hasta semanas, a una distancia de entre 30 y 40 kilómetros de altura llevando las cargas de sus clientes a unas condiciones near space”, similares a las que se dan en el espacio en cuanto a temperatura, vacío, radiación, etc. Gracias a este servicio, Aistech ha podido simular durante varias horas, en una prueba real, su cámara en condiciones espaciales (incendios), en un tiempo récord, a un precio por kilo de elevación pequeño y minimizando el riesgo de fallo.
Además, Zero 2 Infinity informa que los servicios de vuelos suborbitales comercializados incluyen la grabación de contenidos (imágenes, videos, y grabaciones a 360 grados), la transferencia de datos al cliente en tiempo real, y la sensorización de la carga (control de temperatura, vibración, humedad, etc.), así como la recuperación de todo el material y la posibilidad de personalizar el servicio en función de las necesidades de los clientes.
“Queremos establecer relaciones a largo plazo con nuestros clientes, entender sus necesidades, dar respuesta a los requisitos de un mercado global en el que ofrecemos un servicio alineado con estas premisas. Hoy el espacio vuelve a estar de moda y nuestros servicios dan acceso a él de un modo competitivo en un mercado en expansión global”, aseguran desde la compañía.
Y es que el mercado de los micro y nano satélites seguirá creciendo de un modo exponencial hasta lanzar más de 3.000 pequeños satélites en menos de 10 años. Y Zero 2 Infinity, desde España, no quiere quedarse atrás: “Nuestro país ofrece unas buenas condiciones de partida: una meteorología idónea, sueldos competitivos y un capital humano con gran experiencia en la industria aeroespacial, grandes profesionales expatriados dispuestos a regresar a su país”, aseguran. La empresa, que ya cuenta con varias bases de operaciones en Barcelona, Córdoba, planea abrir la siguiente en Canarias.